OPEN DE AUSTRALIA | A DAY AT THE DRIVE
Nadal se exhibe ante Thiem en su regreso a las pistas
Rafa Nadal lució una potencia de golpeo más que notable en su vuelta a las pistas para batir a Thiem en la exhibición de Adelaida. Podrían encontrarse en la ATP Cup.
Rafa Nadal no sabe jugar sin intensidad. Desde que era un niño le pega a la bola como si no hubiera mañana, da igual que se trate de un entrenamiento, un partido oficial o una exhibición como la que disputó este viernes en Adelaida. El balear, que sí ha podido entrenarse un par de horas diarias durante los 14 días de cuarentena obligatoria que concluyeron para él el jueves, lució una potencia de golpeo más que notable para vencer a un rival que se le atraganta, sobre todo en pista rápida, Dominic Thiem (7-5 y 6-4).
El regreso del único español que ha sido capaz de triunfar en el Open de Australia a las pistas fue esperanzador. Sin negarse alguna que otra sonrisa, Nadal se lo tomó muy en serio, como decimos que acostumbra, y percutió sobre la resistencia del austriaco, campeón del US Open en 2020. En la pista central del Memorial Drive, llena de público (unas 4.000 personas), sin distancia social ni mascarillas en una ciudad que vive una vuelta absoluta y envidiable a la normalidad tras lograr una tasa de contagios por COVID cercana al 0, disfrutaron después de la semi-espantada de Djokovic, que primero se borró y después jugó el segundo set contra Sinner y lo ganó; y la victoria de Serena Williams ante Osaka en tres mangas. No se veía tanta gente en una cancha de tenis ni tan junta desde los últimos torneos de febrero y principios de marzo del año pasado.
Pocas bromas
El número dos del mundo le dobló la mano a menudo a Thiem, que pegó varias cañas por la dureza de los envíos del español. Los dos jugaron relajados, pero fueron suficientemente competitivos, aunque Nadal puso un puntito más de empeño en la victoria. Se la dio un quiebre en cada set, después de que en el primero levantará las dos opciones que tuvo Thiem. Entre risas, el manacorí se desquitó de la derrota en las ATP Finals, cuando perdonó a Dom.
Aunque no valía para nada, esta vez no lo hizo. Sacó dos veces para ganar cada parcial y cumplió. Buenas sensaciones, buena forma, buena pinta a la espera de mayores empresas. Ambos podría encontrarse en la ATP Cup desde el 2 de febrero. "Rafa no comparte muchos éxitos, sobre todo en Roland Garros, ahí nada", bromeó Thiem. En Melbourne, si se cruzan, será otra historia.