OPEN AUSTRALIA
Las tormentas alivian el inicio del Open de Australia
Tormentas severas en el estado de Victoria amortiguan los incendios, hacen que bajen las temperaturas y mejoran la calidad del aire en Melbourne en el inicio del Open de Australia.
La lluvia llegó por fin al estado de Victoria y toda la costa Este de Australia con un efecto reparador que amortiguó algunos de los incendios que devastan desde el pasado mes de septiembre gran parte del país oceánico y que han causado grandes pérdidas humanas, animales, naturales y materiales. Fue un verdadero alivió también para el primer Grand Slam del año, que comenzó en Melbourne esta mañana (madrugada en España) y que estaba en el ojo del huracán por las protestas de algunos jugadores y el recelo de la opinión pública, al considerar un peligro la práctica del tenis por la mala calidad del aire y las altas temperaturas. Dos problemas atenuados por la llegada de un ‘maná’ en forma de agua desde el cielo aussie.
El de Melbourne amaneció encapotado ayer, pero por culpa de las nubes, no del humo que lo había cubierto en anteriores jornadas. El ambiente se tornó agradable (unos 20 grados) y completamente respirable. La previsión para hoy anunciaba la continuidad de las tormentas, con alerta y alta probabilidad de fuertes lluvias (de un 90% a primera hora y un 70% por la tarde), que por un lado ayudan pero a la vez traen otros problemas como inundaciones, cortes en el suministro eléctrico y cierre de carreteras. En el caso del Open de Australia, la alegría tampoco es completa, porque la organización temía que se suspendieran algunos partidos de las pistas exteriores, lo que afectaría al calendario de mañana. Al aire libre tenían que jugar varios españoles, como Carballés, Davidovich, Feliciano López contra Bautista y Paula Badosa. Los horarios del segundo día, en el que debutarán, entre otros, Rafa Nadal y Garbiñe Muguruza, no fueron confirmados con antelación.
El Gobierno australiano trata ahora de reactivar el turismo, con ayudas económicas, y sus funcionarios agradecen personalmente cada visita en aeropuertos y estaciones. "Todo el mundo está haciendo lo máximo posible para entender por lo que están pasando tanto la gente, como animales y el propio ecosistema, con el objetivo de ayudar en cualquier medida", dijo Djokovic en su comparecencia previa al evento. Por las calles de Melbourne pasean algunas personas con máscaras, pero ya se respira mejor y vuelve el bullicio veraniego, estimulado en parte por el inicio del campeonato tenístico que es el orgullo de un país amable que sufre.
Suspensión de partidos si el aire se contamina
La organización del Open de Australia elaboró un protocolo para no poner en peligro a los jugadores durante el torneo, que incluye la suspensión de los partidos si la contaminación del aire supera un índice Alphington PM2,5 (partículas finas sólidas y líquidas en suspensión de menos de 2,5 micras) de 200 puntos. Si está entre 97 y 200, médicos y organizadores discutirán si se juega. Diez horas antes del inicio de la competición, era moderado: 55. El COI permite que se practiquen deportes si el valor no traspasa los 300.