David Ferrer, finalista en la última Copa Masters de Shanghai y número cinco del mundo, ha afirmado hoy que prefiere no marcarse objetivos para la próxima temporada y centrarse en estar bien físicamente e intentar hacer una "buena pretemporada".
Ferrer ha hecho estas manifestaciones durante la renovación de su contrato de patrocinio por tres temporadas más con la firma deportiva Prince, acto en el que estuvo acompañado por Javier Piles, su entrenador, y por Tom Russ, encargado de los jugadores top200 de esta empresa.
Preguntado por los planes para la próxima temporada, Ferrer ha explicado que tras disputar el torneo de Australia disputará varios torneos "indoor" de Europa. Ferrer ha asegurado que el pasado año fue el "mejor" de su carrera y ha indicado que, aunque ha habido "momentos muy buenos", personalmente se queda con "la última semana", cuando disputó la Copa Masters de Shanghai.
"La vida no me ha cambiado mucho porque ya son muchos años jugando", ha asegurado el tenista, quien ha agradecido a Prince su apoyo durante años. "Un año cambié de marca y lo pase mal. Sólo se jugar con ella. Si me ha ido bien en gran parte ha sido por el apoyo que he tenido de Prince", ha manifestado Ferrer, quien ha comentado que suele llevar "unas seis o siete raquetas" a cada partido y que, dependiendo del número de sets, puede usar hasta cinco.
Tom Russ ha asegurado que la firma está ligada con el tenista alicantino "sobre todo por su personalidad", al tiempo que ha destacado la evolución de su juego durante las últimas tres temporadas y le ha agradecido su colaboración en el desarrollo de nuevos modelos.
