El fondo CVC, en LaLiga, el negocio del “medio” siglo.
La alianza entre Real Madrid y Barça ponen sobre la mesa los problemas de vender e hipotecar unos derechos a 50 años vista.
En una semana donde el fichaje del Leo Messi por el Paris Saint Germain, ha centrado las miradas del planeta fútbol, una noticia probablemente de un mayor calado ha salido a la luz. La tentación de hablar en "El valor del Deporte" de las implicaciones que tiene esta venta para las arcas del Barça, del FairPlay financiero o de como las leyes fiscales francesas a diferencia de lo que ocurrió con Cristiano en Italia, encarecen este fichaje más de lo que se esta publicando, era desde luego una tentación grande.
En cualquier caso esta semana hablaremos de la "bomba" que ha soltado LaLiga al anunciar por medio de su presidente, la gran noticia de la inversión multimillonaria del fondo CVC. 2700 millones a cambio de más del 10% de los derechos audiovisuales. Desde luego es una cifra mareante y muy atractiva. Donde encontramos la principal pega es en el mismo punto en el que parecen haberla encontrado el Real Madrid y el Barcelona, y es en la duración de este acuerdo. 50 años de cesión sobre estos derechos audiovisuales son una carga verdaderamente llamativa y sinceramente muy atrevida.
El fondo en realidad compra el 10,95% de los derechos de televisión durante 50 años y, además, compra el 10,95% del resto de negocios (patrocinadores, licencias...) para siempre. Algunas informaciones apuntan a que CVC contempla salir a bolsa a lo largo de la próxima década con un valor aproximado de 36.000 millones, no obstante, actuamente han desmentido esta intención.
Realmente nadie puede saber si los derechos audiovisuales valdrán más o menos dentro de unos años, por eso cualquier inversión se entiende tiene cierto riesgo. Dicho esto estimar que los derechos audiovisuales van a sufrir una espectacular caída en las próximas décadas es muy aventurado, más cuando la tendencia siempre ha sido al alza.
Tomar de referencia el último año, un año de pandemia sin precedentes para hacer cualquier estimación sea el Ebitda o cualquier otra, no parece una referencia muy objetiva.
Barça y Madrid no son habitualmente mejores amigos, y probablemente a Laporta o Florentino Perez, pocos irán a reclamarles nada en el año 2071 por lo que me parece un ejercicio importante de valentía no pensar en el "aquí y ahora". Claro que a Laporta le encantaría contar con fondos para renovar el Camp Nou, o a Florentino poder asumir la ficha del próximo galáctico, pero los números personalmente no creo que acaben de salir.
La mayoría de clubes están a favor por que les salva la papeleta actual y porque no lo olvidemos la mayoría de clubes son sociedades anónimas deportivas, es decir que los accionistas principales ven aliviadas las inversiones en infraestructuras y otras cuestiones que ahora aumentaran el valor de su activo para cuando decidiesen vender, sin embargo Barça y Real Madrid no pertenecen a Laporta ni a Florentino pertenecen a los socios.
En realidad con los estudios que plantean los opositores a este plan es el negocio del siglo, pero con el planteamiento de LaLiga les están metiendo un golazo, ya que si las previsiones del Real Madrid son interesadas y las suyas son que estos derechos solo crecerán al 1,3% dentro de 13 temporadas, a poco que la inflación aumente un punto porcentual más, será al fondo al que no le saldrán las cuentas y aunque el dinero que recupere sea un numero mayor, el valor del mismo será notablemente menor y la verdad viendo el gran resultado que han conseguido en motociclismo donde multiplicaron por siete y Formula 1 no parece probable que no lo hayan calculado.
Honestamente las previsiones que plantea el Real Madrid no parecen tan descabelladas como LaLiga parece querer hacernos creer y no es razonable imaginar unas caídas catastrofistas. Claro que podemos imaginar que si el futbol deja de tener interés y su valor cae a 0 será una mala inversión, pero eso podría aplicarse a cualquier negocio del mundo sin una base lógica.
Cuando se propuso el famoso proyecto de la SUPERLIGA, era restrictivo porque limitaba el acceso a la nueva competición, pero ahora más que nunca aplica el "momento y oportunidad", se reparte un dinero entre los clubes que ahora están en primera y segunda por los derechos a 50 años. ¿Como sabemos que clubes habrá dentro de 40 peleando por LaLiga?¿No genera esto una desventaja frente a los que ahora dispondrán de este dinero? Es un mal de nuestro tiempo, creemos que la situación que vivimos actualmente será la que permanecerá inalterable a lo largo del tiempo, y si algo nos demuestra la historia es que en 50 años puede cambiar todo múltiples veces.
Lo que sí que es cierto es que LaLiga y el fondo CVC han aprendido de los errores de la SUPERLIGA y han sabido invertir y modular el discurso informativo. Nos cuentan que ahora desde Italia están muy arrepentidos para generar esa sensación de oportunidad que no se nos puede escapara a nosotros.
No utilizare el argumento ventajoso de que hace 50 años los derechos audiovisuales ni siquiera tenían valor, como vamos a saber lo que valdrán en otros 50, pero cada año aparecen nuevas oportunidades, nuevas plataformas como Amazon o Facebook y las que vendrán en un mundo interconectado. Sin hacer de primeras un análisis muy profundo, es fácil visualizar que en un mundo con una población al alza, en la que países como India y China con altos impactos demográficos y desarrollo, tienen cada vez más aficionados al fútbol y en una era en la que la tecnología y los dispositivos desde los que poder ver retransmisiones no paran de aumentar, parece sensato afirmar que habrá cada vez más espectadores y por tanto un mayor valor de estos derechos al poderse vender más veces unitariamente.
Como siempre decimos en este blog, el deporte es un negocio y puede haber diferentes visiones, LaLiga ha hecho sus estimaciones y negociaciones seguro de buena fe intentando alcanzar el mejor acuerdo, pero no por ello todos tienen que comulgar con su opinión y es legitimo disentir e incluso judicializar esta situación como parece ha anunciado el Real Madrid. Sin embargo el debate profesional en el mundo del deporte esta últimamente tomando un cariz amarillista y con acusaciones personales más sobre si unas iniciativas son "de barra de bar" y otras no estudiadas o fundadas. Personalmente me parece un absoluto "negociazo" para los grandes inversores del fondo CVC y que sobre un tema a tan largo plazo se requeriría un tiempo prudencial para su estudio y valoración y no decidir a la carrera mientras el dinero se siente caliente.