En el nombre del padre, del hijo y de los nietos
Los Marquitos-Marcos Alonso contra los Grosso-Llorente, una rivalidad de generación en generación.
Debutó el 12 de enero de 1964, primer partido de la segunda vuelta, nocturno y televisado, en el viejo Metropolitano. El rival fue el Murcia. Marcó en el 83′ un celebrado gol de chilena, el 2-1 con el que ganaría el Atlético e iniciaría su recuperación.
Marquitos, por nombre completo Marcos Alonso Imaz, fue gran escudero de Di Stéfano en los años de gloria del Madrid. Ya treintañero, apuró su carrera en el Hércules, el Murcia y el Calvo Sotelo.
A raíz del mensaje de mi amigo hice memoria. El Murcia. El equipo del debut de Grosso. Comprobé que ese año Marquitos jugó en el Murcia y que estuvo en el partido. Y que como central, marcó Grosso, delantero centro. Así que no sólo les había visto jugar a los dos, sino que les había visto jugar frente a frente. Marquitos tuvo un hijo futbolista, Marcos Alonso Peña, que tras cuajar en el Racing, casa solar de la saga, triunfó en el Atlético y en el Barça. Para disgusto de su padre, el Madrid no lo quiso. Fue un extremo brillante, internacional en todas las categorías. A su vez tendría otro hijo futbolista, Marcos Alonso Mendoza, que tampoco cuajó en el Madrid. Llegó a pesar en el Castilla, pero ha hecho su carrera fuera, parte en la Serie A, más parte en la Premier.
Por su lado, una hija de Grosso, María Ángela Moreno, se casó con otro futbolista célebre, Paco Llorente Gento, que a su vez era hijo de una hermana del celebérrimo Gento (los cuatro Llorente Gento serían grandes deportistas. Los dos primeros, Joe y Toñín, baloncestistas; los siguientes, Paco y Julio, futbolistas). Paco Llorente, extremo de velocidad prodigiosa, se inició en el Atlético y saltó al Madrid en lo que fue el primer caso de pago de cláusula de rescisión. Terminó su carrera en el Compostela.
Paco Llorente y María Ángela Moreno tuvieron también un hijo futbolista, Marcos Llorente Moreno, al que, ¡qué insistencia! también repudió el Madrid tras criarlo en su cantera, y helo ahí triunfando en el Atlético. ¿Y la generación intermedia, Marcos Alonso Imaz y Paco Llorente Moreno? ¿Habrían jugado entre sí? Llamé al primero: “No me suena. He jugado mucho con él en la piscina del Madrid, donde íbamos de chicos. Éramos muy amigos las familias, pasábamos mucho rato juntos, pero él es más joven. Yo soy más de la quinta de Joe. A Paco le saco varios años”.
No me rendí y pedí a un compañero de As, Diego Martín, que hurgara en el ordenador, cruzando nombres y alineaciones ¡Y apareció! Fue el 14 de diciembre de 1986, en la Liga de los playoff. Marcos estaba en el Barça, Paco Llorente en el Atlético. El partido acabó 1-1 y el gol del Atlético lo marcó Marina en el 52′ al transformar un penalti por derribo de Zubizarreta a Paco Llorente. Marcos jugó 61′, hasta ser sustituido por Calderé, que hizo el empate en el 80′. Paco Llorente dejó el sitio a Julio Salinas en el 85′.
Así que Marquitos y Grosso en enero del 64, Marcos Alonso y Paco Llorente en diciembre del 86, otro Marcos Alonso y Marcos Llorente en estos días. Abuelos, padres y nietos frente a frente. Los Marquitos-Marcos Alonso, en línea masculina directísima, los tres con el mismo nombre y primer apellido. Los Grosso-Llorente con un meandro para enriquecerse con la sangre Gento. Los seis han sido internacionales por España.