Patricia, la mujer que hizo de David Villa una leyenda
El mejor goleador de la historia de España deja el fútbol a final de temporada en Japón. Su esposa y sus hijos han sido su gran apoyo.
David Villa ha anunciado su retirada a los 38 años. El mejor goleador de la historia de la selección española cuelga las botas tras una brillante carrera.
Siempre acompañado de los suyos, el futbolista asturiano ha recorrido medio mundo dando muestra de su buen juego y personalidad.
Con un palmarés y experiencia inigualable, el Guaje dice adiós poco después de que lo hiciera su amigo y compañero de batallas Fernando Torres.
En ambos casos, hablamos de hombres familiares, dedicados a sus hijos y que han mantenido como pareja a su 'novia de toda la vida’.
Repasamos la carrera de Villa y el papel fundamental de su esposa en ella.
La mujer invisible
Patricia González es mucho más que una mujer discreta. Por mucho que se intente, es prácticamente imposible saber mucho de ella.
De los pocos datos conocidos, el hecho de que Patricia también jugaba al fútbol cuando era adolescente, concretamente de lateral derecho en el Santo Tomás de La Felguera, el pueblo que la vio crecer.
Se conocieron cuando ambos tenían 17 años y él jugaba en los juveniles del Sporting de Gijón. Desde entonces, tienen fama de mantener una de las relaciones más estables del fútbol español.
Ausente en las redes sociales, es sinónimo de discreción y humildad. En muy pocas ocasiones se ha dejado ver acompañando a su marido en el campo. Extremadamente tímida, son contadas las fotos en las que aparece con su familia, ni siquiera en eventos promocionales del club, a los que Villa acude solo con sus pequeños. Tampoco viajo a Sudáfrica aunque sí estuvo en la Eurocopa de Sudáfrica. Es más habitual verla en otros ambientes más hogareños, como por ejemplo, disfrutando de las fiestas de La Felguera acompañada de sus suegros.
Los que la conocen aseguran que odia salir en las revistas y es esquiva con los medios de comunicación. Patricia no es el prototipo de mujer de futbolista. De figura menuda, es normal verla con una coleta y sin maquillar. No comparte las salidas nocturnas con las esposas de otros jugadores y tampoco es habitual verla cargada de bolsas saliendo de las boutiques de grandes firmas. Su prioridad ha sido siempre la familia y la carrera de su esposo.
Es una mujer de su casa. Le gusta cocinar, muchas veces fabada o por lo menos una vez a la semana. Se entienden en casi todo aunque una de sus luchas con su marido es que sea más ordenado.
Relación ejemplar
Como cualquier pareja tradicional, tras el noviazgo, en 2003 se casaron en Langreo y pronto llegaron los hijos. Zaida nació en diciembre de 2005, unos meses después de que Villa fichara por el Valencia C.F. En agosto de 2009 nació Olaya y en enero de 2013, Luca.
Todos han seguido la andadura profesional de Villa y como familia, además de residir en Valencia, han pasado por Barcelona, por Madrid cuando Villa fichó por el Atleti, por Nueva York y por el equipo australiano Melbourne City. Su periplo por el mundo termina ahora en Japón, donde han permanecido un año.
La familia numerosa de David le ha acompañado siempre, siendo clave en su éxito y perseverancia. Ahora, en el momento de la retirada, el asturiano ha querido rendirles homenaje con estas sentida palabras: "a mi familia, mujer e sus hijos, por el apoyo que me han brindado durante mi carrera. Sin ellos no lo hubiera conseguido", aseguró el delantero el rueda de prensa.
"Mis hijos son el mejor regalo que nunca me han dado", confesó el futbolista en una entrevista. Sin duda ahora tendrá mucho más tiempo para dedicare a los suyos.
Villa colgó el pasado miércoles las botas tras ganarlo prácticamente todo desde que comenzara en el Sporting de Gijón en 2001.
Con una carrera de 19 años, ha ido de España a Estados Unidos, pasando por Australia y Japón, donde finalizará su recorrido en el Vissel Kobe. Una etapa, esta última, en la que el matrimonio ha tenido mucho contacto con Iniesta y su esposa, a los que les une una amistad desde el paso por el Barcelona y por la Selección.
Ahora Villa volverá a Estados Unidos, junto a su mujer y sus tres hijos, donde seguirá unido al fútbol norteamericano con la creación del Queensboro FC, un nuevo equipo de fútbol que empezará a competir en 2021 en la USL, una categoría inferior a la MLS. Les deseamos todo lo mejor.