Una de las imágenes más típicas y habituales del tenis es el momento en el que un jugador tiene que sustituir el overgrip usado por uno nuevo. En la televisión, los profesionales aprovechan los cambios de pista para este menester.

Parece algo muy sencillo cuando vemos al tenista de turno reemplazar el puño de su raqueta en un santiamén, pero luego, a la hora de la verdad, nos asaltan las dudas y nos damos cuenta que la cosa no era tan fácil como parecía.

A continuación, vamos a ver los aspectos más importantes que debemos tener en cuenta cuando sustituyamos el overgrip de nuestra raqueta.

Retira el antiguo

Antes de colocar el overgrip nuevo, es necesario que retires el antiguo. No obstante, si deseas un mayor grosor y amortiguación, puedes dejar el usado y colocar el nuevo encima.

Para retirar el puño gastado, quita la cinta adhesiva que mantiene fijo el overgrip y que se sitúa en el extremo superior de la empuñadura (cerca del corazón de la raqueta) y desenróllalo con cuidado de no deteriorar el grip original que se encuentra debajo.

Selecciona el tuyo

Los tres atributos que caracterizan al overgrip son:

• Comodidad: dependiendo del confort y la amortiguación que nos proporcione, nuestro overgrip será más o menos cómodo.
• Agarre: es importante que el puño que elijamos nos garantice un buen agarre que evite que se nos pueda escurrir la raqueta y tengamos un susto.
• Absorción de humedad: normalmente, las manos nos sudan cuando jugamos al tenis. Por eso, es importante que nuestro overgrip sea capaz de neutralizar bien la humedad.

Para los jugadores amateur, es recomendable usar un overgrip que ofrezca comodidad y agarre.

Si entrenamos todos los días y estamos buscando competir con regularidad, es preferible que nuestra empuñadura sea capaz de absorber bien la humedad, ya que cuanto más tiempo estemos en pista, más sudarán nuestras manos.

Consideraciones previas

• Es mucho más cómodo colocar el overgrip sentado que de pie, ya que disponemos de mucho más apoyo y ello facilitará la labor.
• Cuando retiramos el plástico protector, debemos tener en cuenta que la parte que estará en contacto con nuestra mano es la que viene protegida.
• No te deshagas del adhesivo que trae el overgrip, puesto que nos será útil para fijarlo una vez que esté colocado.

Colocando el overgrip

Para colocar nuestro overgrip correctamente, localizaremos su extremo más delgado que, además, contiene un poco de adhesivo. Esta parte será la que vaya en la base del mango (la parte que tiene los biseles más anchos y contiene el tapón con el logotipo de la marca).

Debemos colocar el extremo adhesivo ligeramente angulado para que, conforme vayamos enrollando el overgrip, vaya cubriendo bien toda la superficie del mango. Es importante que mantengamos la tensión durante la colocación para evitar que se formen incómodas burbujas.

Si somos seguidores del circuito ATP, habremos visto que algunos jugadores con revés a una mano, como el francés Richard Gasquet, no cubren toda la superficie del mango con el overgrip. En ese caso, la superposición será más gruesa y la sensación de amortiguación y confort será mayor.