Mayo y junio, los 'meses' del Madrid
Llegan mayo y junio y se nos suceden los recuerdos. De cumple en cumple, de fiesta en fiesta…
El mes de mayo no es sólo el mes más luminoso de la primavera y el del Día de la Madre. Mayo también es el mes de las efemérides madridistas en su competición fetiche: la Copa de Europa. Lo mismo se puede decir de junio. Tener 13 títulos en la mochila da para mucho y más si tiramos de hemeroteca para fijar en el calendario las efemérides que nos recuerdan en qué día del año se ganó cada una de ellas. De hecho, la Primera, la Copa de Europa con la que empezó todo, se registró el 13 de junio de 1956. Fue en París, con aquel 4-3 al Stade Reims en un partidazo espectacular (goles de Di Stéfano, Marquitos y Rial, 2). La Segunda aconteció un 30 de mayo de 1957 (este jueves se cumplirán 62 años). El Madrid ganó en la final del Bernabéu a la Fiorentina por 2-0 (Di Stéfano y Gento). La Tercera fue de las más bellas y más emocionantes. Fue ante el Milán en Bruselas, con triunfo agónico en la prórroga por 3-2 (primero marcaron Di Stéfano y Rial, y la puntilla en el descuento la puso Gento). Se jugó el 28 de mayo de 1958 (mañana se cumplirá 61 años). Vamos con la Cuarta. También fue en junio. El 3-J de 1959 en Stuttgart. De nuevo el Stade Reims el rival, pero con triunfo más sencillo (2-0: Mateos y Di Stéfano). La Quinta, además consecutiva, fue la más grande de todos los tiempos. Un abarrotado Hampden Park, en Glasgow, fue testigo del impactante 7-3 al Eintracht, con cuatro goles de Puskas y tres de Di Stéfano. Se jugó el 18 de mayo de 1960. La BBC sigue repitiendo el partido cada Navidad. Inolvidable…
La Sexta se espació seis años, pero se recuerda con mucho cariño porque es la única final jugada por once españoles. El Madrid derrotó al Partizán (2-1, Amancio y Serena) en un precioso Estadio Heysel en Bruselas, con muchos emigrantes de nuestra tierra en las gradas. La famosa final de los Ye-Yés se jugó el 11 de mayo de 1966. La Séptima se hizo esperar. Mucho. Nada menos que 32 años. La primera triunfal que vimos con nuestros ojos los de mi generación (sí contemplamos la final de 1981 con el Liverpool en París pero la derrota hizo que la borrase de mi memoria). En Ámsterdam se jugó el mítico partido del gol de Mijatovic, el que cambió para siempre nuestras vidas. Y la fecha nadie del Madrid la olvida: San 20 de mayo (también cumpleaños de nuestro Iker Casillas). La Octava tardó poco en llegar. Fue el 24 de mayo, de nuevo en París. El Valencia fue nuestro rival y le cayó u impactante 3-0, con goles de Morientes, McManaman y Raúl, con aquella carrera en solitario hasta sortear a Cañizares y Djukic. La Novena fue un día especial en la capital, el Día de San Isidro. El 15 de mayo de 2002 se ganó en Glasgow al Bayer Leverkusen con el golazo mítico de Zidane y las paradas milagrosas de Casillas. La Décima, que tanto nos emocionó por la identidad del rival y cómo fue su desenlace, se jugó en Lisboa el 24 de mayo de 2014. El Atleti del Cholo llevó al Madrid de Ancelotti al límite, pero el gol heroico de Sergio Ramos (minuto 92:48) abrió la espita de la goleada que se consumó en la prórroga (goles de Bale, Marcelo y Cristiano). La Undécima repitió rival y desenlace. Esta vez el Madrid ganó por penaltis, tras el 1-1 de los 120 minutos jugados(gol de Ramos). Se jugó el 28 de mayo (mañana se cumplirán tres años) y en San Siro se recuerda la entereza con la que los blancos tiraron los penaltis (Lucas Vázquez, Marcelo, Bale, Ramos y Cristiano no titubearon). Nos vamos a la Duodécima. Fue en Cardiff un 3 de junio (2017), como la Cuarta. Exhibición del Madrid de Zidane ante la Juventus, que cayó por 4-1 (goles de Cristiano, dos, Casemiro y Asensio). Y cerramos el maravilloso e irrepetible ciclo triunfal el año pasado en Kiev. El 26 de mayo (el domingo se cumplió el primer aniversario). La chilena de Bale y los dos errores de Karius marcaron un ciclo triunfal único, con tres Champions consecutivas. Por eso, señores, ser del Madrid es un privilegio. Llegan mayo y junio y se nos suceden los recuerdos. De cumple en cumple, de fiesta en fiesta…