Seguridad, qué bonito nombre tienes
Lamentablemente, durante cada temporada de caza recibimos la mala noticia de cazadores que fallecen practicando aquello que más les apasiona, la caza.
Lamentablemente, durante cada temporada de caza recibimos la mala noticia de cazadores que fallecen practicando aquello que más les apasiona, la caza. Por eso, seguir las recomendaciones que casi todos ya sabemos, es necesario para evitar estos accidentes.
Por norma general, la mayoría de estos consejos ya forman parte de la práctica habitual de la caza, pero nunca está de más volver a recordar algunos de ellos, sobre todo, los referidos a las medidas de seguridad. Algunos son:
- Estar en posesión de la documentación requerida para cazar (de cazador, armas y perros).
- Seguir al detalle las normas básicas de manejo y transporte de las armas, así como de su munición. Entre ellas, llevarlas enfundadas hasta el momento de iniciar la jornada, no perderlas nunca de vista e inactivarlas en los momentos de descanso.
- Asegurarse de que los perros de caza están en plenas facultades (por ejemplo, evitando en estos primeros días de calor llevar perros demasiado mayores) y no olvidar nunca suministrarles agua durante la jornada y algún complemento alimenticio, si hiciese falta. También hay que extremar las precauciones durante su transporte y en los descansos en carretera, no perdiéndoles de vista en ningún momento.
- Llevar un botiquín básico de primeros auxilios para perros y cazadores.
- Comprobar que llevamos los teléfonos móviles y/o las emisoras a plena carga.
- Ser generosos con las distancias de seguridad ante personas, bienes, caminos y demás vías públicas.
- Extremar el cuidado y respeto hacia otros usuarios del entorno natural, como agricultores, ganaderos, senderistas, recolectores, ciclistas, etc.
- Vestir alguna prenda de alta visibilidad durante el ejercicio de la caza (pañuelos, brazaletes, gorras, chalecos...). la ropa de caza de alta visibilidad es cada vez más necesaria para evitar estos accidentes.
- Conducir con prudencia durante los desplazamientos por carreteras y sobre todo cuando se conduzca con remolques.
- Procurar dejar los vehículos agrupados en una misma zona y, si es posible, vigilados, evitando así accidentes y actos vandálicos.
- Seguir las indicaciones de guardas, postores y prácticos del coto en el que cacemos.
- Prestar la máxima atención en el momento del disparo, teniendo siempre perfectamente localizados a compañeros y perros, para evitar impactos fortuitos.
- Cuidar las especies vegetales, tanto agrícolas como silvícolas.
- No dejar nunca rastro de nuestro paso por el campo (vainas, basuras, plásticos...).
- Tras finalizar la jornada, aportar datos de las especies cinegéticas y protegidas a los responsables del coto, para favorecer de esta forma la gestión y la conservación.
Pero la seguridad no solo es en el momento de la acción de caza, es algo que deberíamos de tener en cuenta a la hora de nuestros desplazamientos con nuestros vehículos.
Generalmente en una temporada hacemos largos trayectos en nuestros coches. Las prisas a la hora de llegar a tiempo a las juntas o donde quedamos con otros compañeros, hacen que, a veces, corramos más de lo debido sin tener en cuenta que, las prisas, no son buenas consejeras, y ello sumado a que las circunstancias climatológicas de la temporada general no suelen ser favorables, se traduce en un gran riesgo para nuestra seguridad y la de terceros.
A la hora de regresar a nuestras casas, si estamos cansados "como mulas", debemos plantearnos no conducir, por eso es tan importante la sensatez tanto cazando como desplazándonos.
Nuestra forma de vida no puede ni debe convertirse en una desgracia plasmada en un titular de una noticia.
Por esta razón deseo seguir sabiendo que todos me leéis después de la temporada, que me contáis vuestras experiencias, lances acertados y fallidos, anécdotas...
Porque si seguís haciéndolo significa que, como verdaderos cazadores lleváis nuestros valores más allá de la práctica cinegética.
¡Salud y buena caza!