El caso de Mario Biondo vuelve a activarse. Roberta Bruzzone, criminóloga italiana que colabora con la familia del marido de Raquel Sánchez Silva, ha asegurado que el cámara de televisión fue “brutalmente asesinado”, descartando la hipótesis del suicidio. Bruzzone, que lleva trabajando en el caso desde hace meses, asegura que no se trató de un asesinato y que “había al menos dos personas en la escena del crimen”.

Aunque la criminóloga asegura tener información suficiente para tener dos sospechosos, asegura que no pueden dar los nombres. “Estamos siguiendo la conducta perturbadora que tuvieron inmediatamente después de la muerte de Mario Biondo. Creemos que hemos identificado al autor de los hechos y tenemos elementos objetivos y sólidos que así lo prueban”, ha asegurado Bruzzone sobre la muerte Biondo, ocurrida el 30 de mayo de 2013.

Aunque en España se cerró el caso ya que el juez encargado de la muerte del marido de Sánchez Silva declaró el sobreseimiento libre y el archivo del caso, en Italia, la familia del cámara logró reabrir el caso, basándose en que “en el cuello de la víctima hay un doble surco” que “desde el punto de vista médico legal no puede inducir el suicidio”, causa que sí determinó el forense español. “¿Cómo puede alguien ser estrangulado y después colgarse de una estantería? Eso es imposible”, ha sentenciado la criminóloga contratada por la familia de Mario Biondo y dejando claro que el caso sobre la muerte del cámara aún no ha terminado.