Terol y el pasadón que le dio a Maverick su primer triunfo

Si hay un apasionado a las carreras que continúa vinculado al Mundial una vez ya retirado ése es Nico Terol. El campeón del mundo de 125cc en 2011 es en la actualidad la mano derecha y la izquierda en el amplísimo proyecto de la leyenda a Aspar y el valenciano rememora para AS el pasadón que le dio a Maverick su primer triunfo en GP. Fue precisamente en Le Mans, en 2011, y con Terol como víctima propiciatoria.

“Recuerdo que yo venía de ganar tres carreras y aquí vine muy motivado y luchador, pero me acuerdo que me encontré con Mack, que estaba en su primer año, y en el momento en el que lo dejé pasar en carrera, o en el que me adelantó, recuerdo que ya le vi algo especial pilotando. Había curvas que las hacía muy estilo MotoGP con una 125cc. Entrando en meta, pisaba el piano interior, que eso con una moto pequeña con la que haces tanto paso por curva era muy difícil, porque es muy fácil caerte. Para pisar un piano interno, tienes que levantar muy rápido la moto y él anticipaba mucho para salir muy rápido”, empieza diciendo el campeón de 2011.

Y continúa: “El año anterior ya me había jugado yo el Mundial con Marc y en esos años me encontré con dos fueras de serie al llegar también Mack. Yo he competido con muchos pilotos fuertes, pero ellos dos tenían algo diferente. Desde 2010 yo ya decía de Marc que era un chaval que iba a marcar, muy bien marcado y subrayado, su no nombre en la historia. Y luego con Viñales dije al verle que tenía una facilidad y un don para entender los circuitos que a mí, por talento natural, es el piloto con más talento natural que yo he visto”.

Nico hace mucho hincapié en esta aclaración: “No quiero decir que Maverick tenga más talento que Marc, porque Marc es el más completo en cuanto a lo fuera de serie. Con esto quiero decir que tiene talento natural, que es ‘killer’ (asesino) y con una mentalidad increíble. No he visto a nadie con todo eso y marca la diferencia con eso. Eso le hace ser el top de los top, que es Marc. Pero la facilidad de ir rápido con una moto o de hacer cosas que ni analizándolas te salen, y mira que yo era muy analítico, Viñales es muy número uno”.

Y sobre la maniobra que decidió aquella carrera del octavo de litro de 2011, la recuerda bien: “Me acuerdo que en la 13 pisé el piano de fuera no dejarle puerta, pero entré a la misma velocidad que en la vuelta anterior y entrando pensé que me colaba. Y mientras pensaba eso él ya me estaba metiendo la moto. Igual me encuentro otro que no es un fuera de serie como lo era él o Marc, y no me adelanta, porque había muy poco espacio. Y vale que me colara, pero a estos killers no les puedes dejar ni medio centímetro ni cometer ningún error”.