McLaren paga su escepticismo

Desde que Red Bull en general y Verstappen en particular comenzaron a mostrar debilidades importantes, siempre hubo un actor secundario que acaparaba el protagonismo. McLaren supo recoger el testigo de ese equipo dominante que por norma general suele existir en la Fórmula 1, pero nunca terminó de hacer efectiva su superioridad con resultados durante los domingos. A pesar de todo, siempre se posicionaron en las clasificaciones como amenaza de la escudería energética. Los de Milton Keynes, con un rendimiento pobre de Pérez, comenzaron a temer por el Mundial de Constructores, donde tan solo tienen ocho puntos de ventaja con los de Woking. Y aunque Verstappen cuenta con 62 unidades a su favor en el de pilotos, ese margen es el precio que está pagando la escudería papaya por su escepticismo.

“Ahora debemos reconocer que no sólo es posible el campeonato de constructores sino también el de pilotos, con las actuaciones que tenemos y algunas de las dificultades que vemos con Red Bull”, admitía Andrea Stella, director deportivo de McLaren, después de el GP de Italia. La carrera en Monza fue otra demostración de decisiones erróneas desde el muro, falta de prioridad hacia un candidato y peleas sobre el asfalto entre sus dos monoplazas, que en esta ocasión privaron a Lando de meter un mordisco importante en el campeonato de pilotos. Con Verstappen sufriendo en la sexta posición, el recorte podría haber sido mayor en caso de anotarse la victoria. Pero a pesar de que Norris, desde que comenzó el curso, siempre lideró al equipo en la general, nunca ha sido el piloto prioritario.

El británico se ha visto obligado incluso a ceder posición con Piastri, como ocurrió durante el GP de Hungría, cuando le dejó en bandeja la victoria al australiano. Más allá de la necesidad por mejorar las salidas, ya que Lando tan solo ha materializado a modo de victoria una de sus últimas ocho poles , en el Hungaroring se marchaba otro botín de puntos importantes para Norris. Y el resumen es que le está costando dar ese salto definitivo, que le convierta en una amenaza real para Verstappen. Aunque a partir de ahora, las cosas deberían cambiar en McLaren. “Tenemos un paquete muy competitivo y esto podría resultar un arma muy importante, especialmente para Lando, en la carrera por el campeonato”, explicaba Stella, dejando entrever que existirá una jerarquía dentro del garaje de Woking.

El GP de Italia parece haber sido un punto de inflexión definitivo para McLaren de cara a esta recta final de temporada (cuando quedan ocho grandes premios por disputarse). Después de comprobar, una vez más, las debilidades por las que atraviesa Red Bull, los de Woking han comenzado a creer en sus posibilidades como reconoce Stella: “Antes de Monza éramos un poco cautelosos, pero ahora podemos ver que McLaren puede competir en circuitos en los que no fuimos competitivos el año pasado”. Y por lo tanto, necesitan a ese número uno que les acerque al que a partir de ahora será otro de los objetivos en la escudería británica, el Mundial de Pilotos.