Interlagos se queda hasta 2030

Su futuro llegó a ponerse en duda durante no pocas veces, pero al final Brasil ha encontrado la forma de renovar su presencia en el calendario de la Fórmula 1 durante cinco años más de los que ya tenía asegurado (2025), hasta la temporada de 2030. Una gran noticia para el país sudamericano que se hizo oficial en el mejor momento posible, durante la celebración de su gran premio, antes incluso de que los monoplazas comenzasen a rodar en la jornada del viernes en Interlagos, donde el Mundial afronta su recta final (luego quedarán Las Vegas y Abu Dhabi).

Pese a que se planeó la construcción de un nuevo trazado en Río de Janeiro, que finalmente se descartó, el Autódromo José Carlos Pace continuará siendo el hogar de la F1 en Brasil como lo lleva siéndolo desde su primera aparición en 1973 (con la excepción del parón en la década de los 80 cuando se corrió en Jacarepagua). Además de ser uno de los circuitos tradicionales y predilectos de la parrilla, con una afición que nunca falla (253.000 espectadores el año pasado), Interlagos ha sido testigo de momentos históricos del campeonato.

Se han celebrado títulos de campeón del mundo y se han visto auténticos dramas, Alonso, por ejemplo, ha vivido allí las dos caras con sus mundiales de 2005 y 2006 y el que se le escapó con Ferrari en 2012. “Brasil tiene una herencia automovilística muy rica y este circuito icónico está entre los favoritos de pilotos y aficionados de todo el mundo. Representa todo lo bueno de las carreras y esperamos ver cómo se desarrolla en los próximos años para crear una experiencia aún mejor”, asegura Stefano Domenicali, el presidente de la F1.

Si se ha llegado a este anuncio ha sido gracias a la importante inversión que ha hecho el alcalde de Sao Paulo, Ricardo Nunes, para mejorar la administración del circuito así como renovar sus instalaciones. “La extensión del contrato consolida a nuestra ciudad como líder global en la organización de grandes eventos con impacto económico y social, generando empleos, ingresos y oportunidades”, celebra. Y el CEO del gran premio, Alan Adler, señala que esta firma “es el reconocimiento al trabajo” que han hecho con una cita que supone un impacto económico de 1.500 millones de reales (290 millones de euros) cada año para la ciudad.

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