Red Bull detecta el problema
Helmut Marko, asesor de la escudería energética, asegura que su hándicap reside en "el suministro de combustible" y que Honda ya le ha dado solución.
Si hay alguien en este comienzo de curso que podría poner freno a la hegemonía de Ferrari en la F1, es Red Bull. La escudería energética se ha postulado desde el primer momento como uno de los dos referentes de la parrilla en esta temporada de cambios derivados de la nueva normativa, pero la fiabilidad está marcando el inicio de campeonato para los de Milton Keynes.
En tan solo tres grandes premios, la escudería energética acumula tres abandonos que han perjudicado, especialmente, a su campeón Verstappen. El neerlandés tan solo ha sido capaz de ver la bandera a cuadros en Arabia Saudí, donde consiguió los únicos 25 puntos que ostenta en un casillero que dejó a cero en Australia y la cita inaugural de Bahréin. En ese último trazado, la debacle fue total para Red Bull ya que ninguno de los RB18 llegó a la meta.
¿Qué pasó? La culpa fue de un vacío que se creó en el sistema de combustible, que impedía que la gasolina llegase al motor. Red Bull descubrió la causa tras el abandono del vigente campeón en Albert Park y tras la cita Helmut Marko, asesor del equipo energético, entró en detalles para ORF: "El problema no estaba en la unidad de potencia, sino en el suministro de combustible. La línea de combustible estalló bajo alta presión. Creemos que eso se debe al porpoising".
A estas alturas y visto el rendimiento del RB18, el austriaco es consciente de que para volver a presentar su candidatura el título tan solo necesitan igualarse en fiabilidad frente a un Ferrari que apenas presenta puntos débiles, y ese es el objetivo a partir de la próxima cita si confían en las palabras de su suministrador de motores: "Honda nos ha dicho que podemos contar con que el problema se solucione antes de la próxima carrera".
Desde Milton Keynes interesa que se cumpla con los pronósticos que han llegado desde la fábrica japonesa, ya que Verstappen quiere un coche digno y a la altura con el que defender su corona. "Si no empezamos a ganar pronto, Max será como una bomba de relojería", dice sobre su situación actual un Marko que conoce muy bien un vigente campeón, que al mismo tiempo le sigue sorprendiendo: "Después de retirarse (en Australia), volvió al box y hablamos todo con calma".
Esa serenidad venía siendo poco habitual en las reacciones de un Verstappen mucho más impulsivo que de partida, llega con 46 puntos de desventaja en la tabla frente al líder Leclerc. Y puede ser, que quizás le interese mucho más gastar su energía durante los domingos, en busca de todos los puntos que se ha dejado por el camino. Siempre y cuando Honda se lo permita...