Ana Carrasco: "Moto3 se ha vuelto mucho más loca"

Si hay un referente femenino a nivel mundial en el ámbito de las motos es Ana Carrasco. Ella es la única campeona del mundo de velocidad entre hombres, en Supersport 300, y en su vuelta al Mundial de Moto3, del que salió al acabar la temporada 2015, fue vigésima en su primera carrera, la del GP de Qatar. Aún está lejos de los puestos a los que aspira, pero progresó desde el primer día y confía en ir a más con el tiempo. La murciana de 24 años repasa con AS su reestreno mundialista.

-¿Cómo valora el primer GP en su regreso al Mundial?

-No ha sido nada diferente de lo que pensábamos que iba a pasar. Lo he dicho siempre, que sigo un poco verde y me tengo que adaptar más rápido. El fin de semana ha ido bien. Ha sido positivo, porque cada día me he ido acercando en tiempos a la cabeza, que era el objetivo. En la carrera he rodado más rápido que el viernes y que en la calificación, así que no puedo hacer más. Tengo que ir adaptándome poco a poco y ya sabía que las primeras carreras serían difíciles. Estoy contenta de cómo estamos trabajando.

-¿Qué es lo más difícil en esta adaptación?

-Es una moto totalmente distinta de pilotar a lo que estaba acostumbrado, que es una moto de calle que se comporta muy diferente. Ahora mismo me parece todo un poco distinto y me cuesta mucho encontrar el límite de la moto y sacarle el rendimiento que hay que sacarle.

-¿Qué es lo que más le exige a nivel físico la moto?

-Realmente, a nivel físico la moto no es muy diferente de lo que llevaba. Es incluso más ligera y físicamente me he adaptado muy bien. Creo que a nivel técnico, la moto se comporta diferente y soy yo la que se tiene que adaptar a todo lo nuevo, a las respuestas de la moto, a llevarla con neumático usado y demás. Durante las primeras carreras tengo que aprender para poder ir más rápido.

-¿Le sorprende el follón que ha habido con las sanciones?

-No me sorprende, porque cuando la gente hace las cosas mal lo correcto es sancionar. No he visto bien que pasó, pero si han puesto las sanciones será lo correcto. Moto3 es una categoría de mucho contacto, de mucho grupo y de mucho rebufo, con lo que de alguna forma hay que controlar un poco que se haga de forma segura.

-¿Tuvo toques en su carrera?

-No, no.

-¿Cuántas carreras cree que necesita para adaptarse?

-(Sonríe). Espero que las menos posible. Estas primeras carreras fuera de Europa serán las más difíciles, seguramente, y después llegaremos a Portimao, donde ya he podido rodar en pretemporada, y lo mismo en Jerez. A partir de ahí creo que podré dar un paso adelante y en cada carrera quiero estar más cerca.

-¿Cuál es el cambio mayor que ha visto en el campeonato desde que lo dejara al acabar 2015?

-El sistema de la categoría es muy parecido. Es cierto que con los años ha empezado a ser una categoría mucho más loca, con muchos más contactos y mucho más de grupo. Los primeros años, con Salom, Maverick y Rins siempre había un grupo de referencia y la carrera se dividía más en grupos. Ahora el grupo de cabeza es muy largo, algo que siempre suele ser así en las categorías pequeñas.