La Copa Astor de la IndyCar a la que aspira Álex Palou
El español del Chip Ganassi puede ser el sexto piloto de la era Indy en inscribir su nombre en el trofeo que ha ganado ya cuatro veces Scott Dixon y dos Josef Newgarden.
Álex Palou aspira este próximo domingo a coronarse como nuevo campeón de la IndyCar en Long Beach. Para conseguir la Copa Astor debe acabar entre los once primeros para así no depender de terceros. En otras disciplinas del motor el trofeo al campeón es bien reconocido, como en la F1, MotoGP y el Dakar. Incluso dentro de la misma Indy la copa Borg-Warner entregada al vencedor de las 500 Millas de Indianápolis es legendaria.
Pero ¿cómo es y de dónde surge el trofeo que se le entrega al campeón de la temporada de la Indy? La Copa Astor se entrega desde el 2011 al campeón y para descubrir sus orígenes hay que remontarse al 1915, año en el que un grupo de personas adineradas de Nueva York compró la instalación de carreras de caballos conocida como circuito de carreras de Sheepshead Bay para organizar carreras automovilísticas a cuyo ganador se le entregaba la Copa Astor.
La competición duró apenas dos años y en su primera edición, que se disputó sobre una distancia de 350 millas en un óvalo de 2 millas, ya vivió la tragedia con el fallecimiento de Enrique Grant, quien murió cuando su vehículo se estrelló durante una sesión de prácticas. A pesar de todo la competición no se detuvo y al vencedor, Gil Andersen con un Stutz y tras 175 vueltas y 3h 24:42, se le entregó la primera copa, hecha de plata y con una doble base de granito. La segunda y última carrera fue para Johnny Aitken, triunfador con un Peugeot pero en esta ocasión sobre una distancia de 250 millas.
Los problemas financieros acabaron con la vida de la prueba y la Copa quedó en el olvido. Con la reunificación de las carreras de monoplazas en una misma categoría tras las pasadas disputas entre la Champ Car, con su copa Vanderbilt Cup al campeón, y la Indy, surgió la incógnita del trofeo que se le entregaría al campeón. Y la solución la encontraron en la historia, en la vieja Astor Challenge Cup.
Para presentar la noticia, Randy Bernard, director ejecutivo de la IndyCar señaló en 2012: “Deseamos unir nuestra tradición y herencia con nuestro futuro. Era muy importante para nosotros encontrar un trofeo que fuera una pieza de arte, con la que los pilotos realmente se sientan honorados al ganar. Es un trofeo que no solo nos recuerda nuestro pasado, sino que vincula nuestro futuro”.
Dario Franchitti fue el primer piloto en llevarse una réplica e inscribir su nombre en la copa como campeón de 2011. Después Scott Dixon en cuatro ocasiones, Josef Newgarden en dos y Ryan Hunter-Reay y Simon Pagenaud en una cada uno, han dejado su nombre en el trofeo. Y Palou puede ser el domingo el sexto piloto en llevarse la Copa Astor y dejar su nombre en ella para siempre.