Renault pierde a su jefe de motores

Acaban de conseguir el mejor resultado posible en un gran premio y sin embargo, la primera posición de Hungría ha venido acompañada de una despedida que queda completamente aislada de esa hazaña. Renault, ahora bajo el reconocimiento de Alpine F1 en el Mundial de F1, ha perdido a Remi Taffin, jefe técnico de motores para la compañía. El francés, que llegó al seno de la escudería en 1999, ha decidido abandonar un equipo donde trabajó junto a Fernando Alonso durante las dos temporadas (2005 y 2006) en las que el asturiano se convirtió en bicampeón del mundo.

Por aquel entonces, Taffin militaba en las filas de Renault como ingeniero de motores, posteriormente en 2009 asumió el control general de las actividades de la escudería dentro del Gran Circo y más tarde, en 2014, el ascenso le llevó a dirigir todas las operaciones del equipo con la entrada de la era híbrida. Finalmente, tan solo dos años después, la escudería del rombo intensificó su participación en la F1 y entonces fue promocionado a director técnico de motores con la misión de impulsar el desarrollo de su unidad de potencia. Un objetivo que un lustro después, sigue siendo tarea pendiente ya que el propulsor del fabricante francés sigue estando a la zaga del resto de fabricantes que operan en el Mundial.

Es cierto que el propulsor de Renault llegó a sumar victorias con Red Bull durante los doce años que fueron aliados, pero la escudería energética terminó apostando de forma arriesgada por el motor Honda a partir de 2019. Tras esa ruptura llegaron varias temporadas sin dar un impulso importante a la unidad de potencia, y esa ha sido la causa principal que ha llevado tanto al equipo como a Taffin a considerar que la mejor opción para ambos, era tomar caminos separados. La escudería francesa está trabajando ahora en un motor revolucionario para 2022 que le permita estar a la altura de los grandes fabricantes y el francés se queda fuera de ese proyecto tras una decisión de “mutuo acuerdo” como han confirmado a ‘Autosport’.

Una decisión "dolorosa"

Pese a la pérdida de un miembro fundamental hasta la fecha dentro del proyecto de Renault en la F1, ahora la compañía no está buscando un reemplazo directo y en su lugar, se repartirán responsabilidades entre al personal actual que trabaja en la fábrica. Pese a los cambios Marcin Budkowski, directo ejecutivo de Alpine, ha dejado claro que el optimismo dentro de la estructura sobre sus planes de futuro no ha cambiado y justificó la marcha de Taffin: “La elección fue impulsada por el hecho de que estábamos planeando introducir un motor completamente nuevo junto con las nuevas regulaciones de chasis”.

Con esas declaraciones, parece que la culpa recae de forma indirecta en el nuevo reglamento que entra en vigor a partir de la próxima temporada, aunque también habla de una situación que “no era idónea” para cumplir sus planes: “La nueva unidad de potencia tiene una nueva arquitectura y cambios que están diseñados para abordar nuestras debilidades en comparación con los competidores. El programa de desarrollo de motor que había marcado para este año no disponía de los recursos necesarios y fue por ello que decidimos poner todos nuestros esfuerzos en 2022. Todo ha sido una decisión estratégica”. “Creo que es lo correcto, pero es doloroso”, remarca el director ejecutivo de la marca, para volver a justificar la decisión: “El resultado es que este año hemos perdido terreno con nuestros competidores”.