El sueño de volver a ser héroe

“Al lugar donde has sido feliz no debieras tratar de volver”, dice Sabina, y sin embargo, hay quien espera con ganas un reencuentro con el que volver a recuperar sensaciones. Como es el caso de Mikel Azcona. El navarro se postulaba al inicio de la presente temporada como uno de los pilotos que estaban llamados a luchar por los objetivos más ambiciosos del WTCR para poder entrar en la pelea por el título, pero su comienzo ha tenido un guion diferente que quiere reescribir en MotorLand. El trazado aragonés fue hace menos de un año el escenario donde el piloto de CUPRA logró su primera victoria en el certamen y ahora, con un bagaje de tan solo seis puntos en su casillero, espera revertir la situación en un fin de semana donde además, el equipo debería ganar terreno tras la polémica del BoP (Balance of Performance).

Ante la controversia que generó el nivel de rendimiento durante las dos primeras citas del certamen, modificando el peso de cuatro de los cinco TCR del Mundial, en el caso del CUPRA León Competición el nuevo ajuste restó 20 kg a un prototipo, que además tampoco añadirá peso de compensación para esta cita debido a los resultados que han sellado hasta ahora, en un marcador que refleja la décima posición como mejor registro del curso. Lo que aleja la realidad de lo esperado, tras un fin de semana para olvidar en Alemania y una sanción en Estoril que privó a Azcona de una sexta posición, todavía lejos de los objetivos que se marca para esta cita especial: "Espero que en mi carrera de casa podamos luchar por el podio como el año pasado".

Pese a que le invade la prudencia para no hacer referencia a la victoria, el navarro deja claro por encima de todo que su objetivo es “dar un buen espectáculo” por todos aquellos que regresan a las gradas y que por fin, tras la ausencia de público en la cita de 2020 debido a la COVID-19 donde Azcona logró su última conquista, pueden verle convertido en el héroe local: "Cuando pilotas y tienes todo ese apoyo, sientes que puedes ir un poco más rápido para conseguir un buen resultado y disfrutarlo con ellos".

El piloto de CUPRA podría compartir sensaciones con un recién llegado que, sin embargo, arrastra mucha veteranía al volante. Y la experiencia siempre es un grado. El equipo español sacó del retiro a Jordi Gené para esta temporada tras un largo periodo alejado de la actividad profesional y en Estoril, demostró que sus habilidades seguían intactas. El catalán puntuó en las dos mangas que se celebraron en el trazado portugués y para esta cita, no solo se conforma con ser “un poco más competitivo” sino que además, de acuerdo con las palabras de su compañero, tiene claro que “cuando corres en casa siempre tienes un extra”. Algo que no puede decir el resto de la parrilla.

El Mundial se 'enchufa'

Aunque el líder, Vernay, no está muy lejos de sus orígenes, correrá en casa del vecino y además, no solo sentirá la presión de los pilotos locales sino que también, se verá achuchado por Lynk & Co y Honda. Pese a que el TCR de los nipones será el prototipo más castigado por los lastres, desde el equipo están convencidos de que ese motivo no les impedirá brillar en la tercera prueba del año. Los Civic Type R competirán con 70 kg más que en Nürburgring y Estoril, siendo el vehículo con mayor peso de toda la parrilla. Aunque la experiencia de Guerrieri durante un 2020 donde compitió con el máximo peso de compensación, hace que se sientan preparados para un desafío donde, por primera vez, compartirán escenario con el Pure ETCR. Será el primer campeonato de turismos multimarca totalmente eléctricos del mundo y en este certamen, Azcona también saldrá a por todas.