Más desgracias en Honda: Crutchlow se lesiona un tobillo
El británico pasó reconocimiento en Barcelona de su antebrazo y se hizo una PCR. Al salir, resbaló y se fracturó los ligamentos de su tobillo izquierdo. Intentará correr el fin de semana.
El colmo de las desgracias en Honda ha sido la nueva lesión de Cal Crutchlow, que iba a reaparecer este fin de semana en Montmeló tras ser baja en las dos carreras de Misano. El inglés se ha resbalado en unas escaleras y se ha roto el ligamento del tobillo izquierdo, con lo que previsiblemente también será baja en el GP de Cataluña, aunque su equipo ha informado de que harán todo lo posible por correr el fin de semana en Montmeló
Su escudería, el LCR Honda de Lucio Cecchinello, ha comunicado por Twitter la desgracia con dos mensajes. El primero decía: "Como estaba previsto para hoy, el piloto del LCR Honda Castrol Cal Crutchlow llegó a Barcelona y fue a ver al doctor Mir el chequeo definitivo de su antebrazo derecho, previo al GP Monster Energy de Cataluña. La herida parece que está curada y está en condiciones mucho mejores que la semana pasada". Y el segundo tuit, el de la sorpresa, decía: "Desafortunadamente, en su llegada al Circuito de Cataluña, se resbaló al salir de la consulta para las pruebas de PCR, rompiéndose los ligamentos de su tobillo izquierdo, como confirmó el doctor Max Ibáñez, miembro del equipo del doctor Mir".
Hay que recordar que Honda ya se quedó en cuadro en el último GP, porque a la baja de Crutchlow por problemas en el antebrazo, tras ser operado de síndrome compartimentado, se sumó el sábado la de Stefan Bradl. El alemán es el probador del ala dorada y el que está sustituyendo al lesionado Marc Márquez, de baja desde la segunda carrera del año. Bradl fue sometido a una leve cirugía entre Misano 1 y Misano 2, por un nervio del brazo que le molestaba, y tuvo que parar al sentir falta de sensibilidad en los dedos de la mano derecha, la del freno. En teoría debería reaparecer este fin de semana, pero también un Crutchlow que se ha roto los ligamentos del tobillo izquierdo bajando las escaleras. El colmo de la mala suerte.