Pol: “Aprilia tiene las mismas concesiones y no las usa igual”
Pol da la cara por KTM: “Tenemos las concesiones, podemos hacer más tests y los aprovechamos. Usamos lo que tenemos. Esas son las reglas”.
KTM ha dejado de ser uno de los patitos feos de la parrilla de MotoGP para convertirse en la fábrica de moda, al punto de empezar a ser envidiada. Sin ánimo de restar mérito, o quizá sí, hay quienes se están encargando de recordar que la victoria de Binder en Brno llegó el pasado domingo en un circuito que tenían muy trillado. Es así gracias a las concesiones que el reglamento les otorga a las fábricas de palmarés y que les permiten entrenar. Lo mismo han hecho en el Red Bull Ring en el que Pol ha empezado liderando y en el de Marco Simoncelli de Misano, donde habrá otras dos carreras en septiembre. Pol que ha estado enrolado en el proyecto KTM de MotoGP desde su nacimiento en 2017, da la cara por su fábrica y recuerda que “Aprilia tiene las mismas concesiones que KTM y no las usa igual”.
Esas concesiones son 6 puntos que se van perdiendo en función de los podios que se consigan en carreras de seco. Una victoria son tres puntos, un segundo son dos y un tercero es uno. Así, Binder dejó en Brno a KTM sin la mitad de sus puntos, lo que no les privó de volver a entrenar allí el pasado lunes, el día después de la carrera. Y poco les importó, porque todas las fábricas trabajan e invierten para estar al nivel de las mejores. Se tomó los años de 2013 a 2015 para otorgar concesiones a fábricas sin palmarés, así que Honda y Yamaha eran las únicas sin privilegios. Ducati se quedó en 2016 sin ellos y después fue Suzuki la que se unió. Ahora KTM está más cerca de conseguirlo, pero para ello le hace falta otra victoria o un segundo y un tercero. Ahí se acabará el derecho a unos entrenamientos privados a los que ahora están sacando más provecho que nunca.
“No hay mucho que decir: tenemos las concesiones, podemos hacer más tests, y los aprovechamos. Aprilia también tiene esas concesiones y no las usan igual. Usamos lo que tenemos, esas son las reglas”, dice Pol con tono reivindicativo cuando se le pregunta por el trato de favor que, por reglamento ha tenido su fábrica.
Y hace lo mismo cuando sale a colación el tema de los neumáticos, de si Michelin les ha dado información privilegiada: “Los neumáticos son los mismos para todo el mundo, recibimos los mismos compuestos, la misma cantidad que el resto de fábricas, así que es lo que es. En Brno los usamos mejor que los demás, nuestra electrónica era mejor que la de los demás y nuestra moto era mejor que la de los demás, exactamente lo mismo que en el pasado, cuando ellos eran más rápidos que nosotros. Esto es una competición y fuimos más rápidos durante el fin de semana”.
Más sobre la exhibición KTM en Brno: “Éramos más rápidos que los demás. Cuando las Yamaha ganan no se quejan de la velocidad, Ducati cuando ganan no se quejan del agarre trasero, y ahora todo el mundo se queja y dicen que nuestra moto es increíble… Es divertido escuchar estas cosas, quiere decir que estamos haciendo las cosas muy bien. Aunque también puede ser que los pilotos estemos haciendo un buen trabajo, no sólo la moto influye en este trabajo. Porque si es sólo la moto lo que importa, entonces Yamaha estaba ganando, no Quartararo, Ducati estaba ganando, no Dovizioso, y Honda ganaba y no Márquez. Cuando alguien gana es porque son muy buenos y muy rápidos, pero ahora es porque la KTM es muy buena. Es gracioso: los pilotos son buenos, la moto funciona y los resultados está ahí. Eso es todo”.
La enorme inversión de KTM (se habla de 40 millones) empieza a dar sus frutos, con un equipo probador que lidera de maravilla Dani Pedrosa, y parece que hay a quien le pica. Mientras, Pol se explica muy bien: “No hemos cambiado tanto. En la pretemporada hicimos algunos cambios, pero nada que digas: ¡Guau, hemos puesto un motor increíblemente más rápido que el de año pasado! No. Hemos trabajado mucho en electrónica, el motor es un poco más rápido que el del año pasado, un chasis con el que buscábamos algo más de consistencia, pero ninguna locura, sólo pequeños pasos en cada parte de la moto y al final ha generado una diferencia. No sé cuánto influyeron las condiciones a nuestro favor y contra los otros, pero lo iremos viendo en cada carrera. Y al final del campeonato veremos nuestro nivel. Es absurdo decir que la KTM es la mejor moto de la parrilla, sólo por el fin de semana pasado. Tenemos que mostrar ese rendimiento durante todos los fines de semana que vienen, y si lo hacemos, entonces a final de año estaré de acuerdo en eso de que nuestra moto es una moto ganadora. Pero tenemos que ir despacio y viendo qué pasa en las siguientes carreras”.
Si sucede eso, se pondrá aún más en duda si es correcta la decisión que ha tomado Pol de dejar KTM al acabar el año para irse a Honda. “Te lo diré el año que viene. No tengo ni idea. En cualquier caso, Márquez no está aquí, el número 1 de Honda no está aquí, es muy difícil de decir. Ahora estoy contento porque la KTM funciona, el año que viene será otro año y ya veremos qué pasa”, dice, y hay ganas de verlo.