Alonso: "Te quedas helado..."
El de Toyota se ha mostrado afectado por el fallecimiento de Gonçalves: "Ha sido una etapa muy negativa, estas cosas te dejan con pocas ganas".
Contrariado, como todos durante la jornada del domingo en Wadi Al Dawasir. Así llegaba Alonso a hablar con los medios. Feliz a medias con su etapa, porque volvió a demostrar un buen ritmo y se llevó otro sexto, pero una delaminación de un neumático provocado por un pinchazo a 250 km de meta le dañó el coche y perdieron algo de velocidad. Y, por supuesto, triste y conmocionado por el fallecimiento de Paulo Gonçalves.
-¿Cómo le ha ido en esta etapa?
-Ha sido una etapa muy negativa por el accidente de Gonçalves, te quita un poco cualquier conclusión que puedas hacer de la etapa a nivel personal… En nuestro caso hemos intentado hacer una buena etapa y Marc ha estado hoy nuevamente increíble, hemos hecho todo a la perfección en cuanto a la navegación, nos ha salido todo muy bien e íbamos a buen ritmo. Hemos tenido un pinchazo y por desgracia a los dos segundos de pinchar se desintegró la rueda y dañó un poco la carrocería, y a partir de ahí nos faltaban unos 8-10 km/h de velocidad punta que nos hizo perder esos tres o cuatro minutos en los últimos 250 km. Echando cuentas un poco por encima, hubiésemos estado muy cerca del Top 3, algo que para nosotros es una muy buena señal después de todos los problemas y haber llegado a meta. A veces una delaminación así de un neumático puede dañar cualquier cosa importante del coche y puedes perder mucho tiempo. Dentro de la coincidencia, no hemos tenido mala suerte y hemos podido acabar sin problemas.
-Va progresando cada día, es un hecho viendo los tiempos.
-Sí, cuando vi los tiempos al final hay una mezcla de frustración, de rabia por saber lo que podía haber sido, y de alegría por ver esta progresión. Poder estar con los mejores un día más en una etapa tan larga sigue abriendo las esperanzas para las últimas etapas. La posición de salida, ahora que hay más arenas y dunas, si sales más adelante igual te penaliza, así que no está mal la sexta posición para mañana dar un apretón más, atacar y que salga también una buena etapa.
-Una etapa muy rápida.
-Hemos ido a tope, ha sido una etapa sencilla en ese sentido. Había zonas de kilómetros que ibas en sexta con el volante recto y no tenía dificultad. Tampoco había piedras, ni nada, por lo que el pinchazo es más sorprendente. Nasser también pinchó y le dejamos una rueda en la primera neutralización. Fue todo un poco con el pie cambiado, pero con ganas de que llegue ya mañana y aprovechar un poco este ritmo que tenemos.
-¿Cómo se queda el ánimo después de la noticia del fallecimiento de Gonçalves?
-Helado, se te queda helado, más que nada porque me lo estáis diciendo ahora. Había rumores cuando llegamos a meta, pero no tenemos contacto con nadie. Uno de los comisarios nos ha dicho algo pero Marc tampoco me lo podía confirmar, y ahora que se ha hecho pues te quedas helado. Es la misma gente que está aquí contigo que está compitiendo en la carrera por pasión, por ganas de hacerlo bien, y no solo compartes la etapa, también momentos en el vivac, en los briefings, en las verificaciones… Cuesta creer que pasen estas cosas, te dejan con pocas ganas.
-Marc dice que notó algo por los helicópteros que había, ¿usted sospechaba algo?
-No, por desgracia vemos cada día un helicóptero o dos y siempre un coche médico, pero siempre eran abandonos o vuelcos de coches. Nunca te pones en lo peor, intentas acabar la etapa y que lleguen buenas noticias cuando acabe, pero hoy no han llegado.
-¿En el Dakar hay que pasar página rápido, es diferente a otras carreras?
-No, creo que en todas las carreras es igual. Es muy difícil pasar página, es un deporte, un día de carrera, de nuestra pasión, pero la vida está por encima de cualquier cosa, y no por ser el Dakar o una carrera dura hay que pasar página. El duelo tiene que seguir siendo increíble para todos.
-¿Hasta qué punto llega a ser consciente del riesgo que corren en cada etapa?
-En cada etapa, en cada test que hace corres riesgos. Es una modalidad arriesgada, a lo desconocido, no solo por el terreno que te vas encontrando, que cada kilómetro es nuevo, sino también por los sitios que pasas, que suelen ser inhóspitos y no tiene quizá las comodidades de un circuito o de otra modalidad más controlada. Cualquier cosa que ocurra en una etapa, no hay un comisario a diez metros de ti, si hay un incendio no hay nadie que pueda apagarlo, si estas con una lesión no hay un médico ahí que te pueda asistir, aunque los helicópteros van lo más rápido posible… Eres consciente del peligro y siempre intentas tenerlo bajo control, pero en el mundo del motor nunca vas a poder tenerlo al 100%.