"Quiero poner la F1 en Ecuador"

Hace una semana cruzaba el 'paddock' cargando con el casco, su trofeo de segundo clasificado y una botella de champán para sus mecánicos. Juan Manuel Correa ya es probablemente el ecuatoriano que más lejos ha llegado en el automovilismo, al podio de la Fórmula 2. Pero este joven de 19 años nacido en Quito quiere mucho más. Aunque, siendo precisos, no pretende poner a Ecuador en el mapa de la F1: "Más bien, espero poder poner la F1 en el mapa de Ecuador y que el automovilismo crezca en mi país. Trabajo en algunos proyectos que anunciaré pronto y que ojalá funcionen, porque para mí las carreras son mi vida y me gustaría que más chicos jóvenes pudiesen hacer lo mismo que yo".

En conversación con AS, Correa habla de una "temporada 2019 positiva". Ha subido dos veces al ‘cajón’, en Azerbaiyán y Paul Ricard, en su año de 'rookie', y marcha octavo en la clasificación. "Debo seguir trabajando y ser más consistente porque aún tengo problemas a una vuelta, es lo que nos falta. Depende mucho de la experiencia y es fundamental el manejo de los neumáticos usados. Este coche es muy pesado y rápido, hay mucha diferencia con llantas nuevas o usadas cuando se monta el compuesto blando".

Compite con el equipo júnior de Sauber y sueña con la oportunidad de pilotar un F1 de la escudería suiza, como ya hizo Tatiana Calderón el año pasado en México. "Con mis resultados aún debo seguir mejorando pero espero que el equipo tome nota y pueda subirme pronto a un F1". Además de frente a sus rivales en la pista, lucha contra la estadística: no constan pilotos ecuatorianos en los registros históricos de la F1. Eso no influyó en sus gustos de pequeño: "Yo comencé en Quito en el kárting con mi padre, que allí corría en rallys. Desde pequeño me encanta todo lo que tiene motor y ruedas". Se puede cambiar la historia.