Golpe de campeonato: Vergne vence tras un inicio surrealista
Defensa fantástica del francés sobre Evans para llevarse su tercera victoria. Wehrlein provocó el caos en una salida que tuvo que repetirse.
La belleza siempre es digna de admirar, pero puede tener una cara menos amigable. Da igual desde donde se vea, Berna siempre deja una foto de postal con su arquitectura medieval y el río Aar dando brillo a la ciudad. Pero recorrer el diabólico trazado que se han inventado en sus calles al volante de un Fórmula E, es otro tema. Es un desafío solo para maestros, y el mejor de ellos fue el que está llamado a serlo al final de la temporada: Vergne. El francés se hace fuerte en el liderato al conquistar su tercera victoria después de un comienzo surrealista.
El sol, tímido en Berna, apareció por fin, pero no hacía falta lluvia para tener emoción, de eso ya se encargó Wehrlein… Se quedó atascado en la chicane de la curva 12 nada más tomar la salida al tocar a Buemi y provocó el caos. Los que iban detrás pudieron esquivar al grupo de coches parados que salieron delante, meterse por la escapatoria y colocarse arriba. Así lo hicieron Massa, Vandoorne, López o Di Grassi, llegando a ganar unas once posiciones del tirón. Se las prometían felices, pero nada de eso valdría.
Como no se cruzó ningún punto cronometrado antes de mostrar la bandera roja, la carrera se reanudó detrás del coche de seguridad… en el orden de la parrilla. Los pilotos que se habían beneficiado se quejaban amargamente a Dirección de Carrera, y los perjudicados respiraban aliviados por tener una segunda oportunidad. Cuando se reanudó la acción, todos pasaron con pies de plomo por la zona de la catástrofe, especialmente Wehrlein, y Vergne comenzaba una ardua tarea desde su pole, la de defenderse de Evans.
El de Jaguar cogió la estela del Techeetah de JEV y no la soltó. Le mostraba el morro en cada curva, intentando ponerle nervioso y buscando huecos donde no había, avisando al francés de que tendría que sudar mucho si quería cruzar la meta el primero. Mientras Vergne cerraba todas las puertas en las narices a Evans, Buemi veía todo en primera persona desde la tercera plaza, el otro suizo, Mortara, chocaba con Sims y se quedaba fuera de carrera, y el karma golpeaba a Wehrlein por la que lio en la salida dejando a su Mahindra tirado en la pista.
La presión asfixiante de Evans continuó hasta el final, llegando a desesperarse, pero todos sus ataques fueron infructuosos incluso cuando una tormenta dejó un final de infarto. La férrea defensa de Vergne fue una 'masterclass', demostrando que no es el mejor por casualidad. Lotterer peleó el podio a Buemi hasta la meta, pero no pudo con él. El alemán es otra vez segundo en el campeonato a 32 puntos de su compañero. Di Grassi fue décimo, y se queda a 33. Demasiada ventaja para sorprender al maestro en el final de Nueva York.
Resultados del ePrix de Berna
La cita final, en Nueva York con doble carrera el 13 y 14 de julio.