Las cinco conclusiones del GP de Francia F1 en Paul Ricard
La victoria de Lewis Hamilton, los fallos de Sebastian Vettel, el retroceso de McLaren, la velocidad de Carlos Sainz y Charles Leclerc...
Hamilton on fire
Después de un decepcionante GP de Canadá, la mejora en el motor Mercedes de su monoplaza le ha hecho concentrarse al límite y llevarse la tercera victoria de la temporada. “Necesitamos ganar”, había dicho en la previa. Era verdad. Y cuando hay una necesidad, el tetracampeón británico suele aparecer brillando como solo él sabe. Tremendo Lewis. Genio histórico.
Los nervios de Vettel
Y mientras Hamilton estaba con la mente y el corazón totalmente en la carrera, Sebastian Vettel dejó a un lado esa inteligencia que se le supone para anticiparse en la salida, chocar con Bottas, después con Grosjean y más tarde en la reanudación con su enemigo íntimo Fernando Alonso. Estuvo nervioso Seb y eso que hizo una gran remontada con un coche que, este sí, de verdad es un Ferrari rojo.
Los mensajes de Sainz
Le falta una llamada de madrugada, para que todo el mundo se entere, pero Carlos Sainz está harto de enviar mensajes al universo F1 para que sepan la clase de piloto que es. En Francia completó un gran fin de semana, tremendo y se merecía, como mínimo, esa sexta posición que era más del máximo de su Renault. El madrileño es un gran, gran piloto. No lo olviden.
Charles, la nueva estrella
Y si Sainz fue para mi el piloto del fin semana, cerca está Charles Leclerc. El monegasco de Alfa Romeo Sauber es la nueva estrella y cada detalle que sucede en el paddock, visita de Lapo Elkann, Vettel agarrándole del brazo en el corralito de las teles para saludarlo etc… le ponen vestido de rojo Ferrari la próxima temporada. Cuidado con este Seb que tiene la cara de loco de los grandes campeones, ese gesto de estar en otra parte, pero en realidad es porque están mucho más en lo que hay que estar que todos nosotros juntos.
McLaren, de peor a mucho peor
Y si hablamos de genios no podemos dejar a Alonso a pesar de que fue el peor gran premio de la temporada para el asturiano lastrado, una vez más, por un McLaren que está decidido a romper la carrera de uno de los mejores pilotos que hay. El equipo de Woking va de peor en peor, ya en Canadá lo hicieron mal y en Francia, mala calificación, mala carrera, los dos fuera de los puntos, tercer abandono seguido de Alonso… Mal. Muy mal.