Boullier: "No voy a dimitir"
“He ganado en cada uno de los equipos en los que he estado”, se defiende el francés de las críticas por el estado del McLaren.
Chocolatinas, Boullier y un coche que no responde a las expectativas. Ese es el resumen. La historia que cuentan es que los trabajadores de McLaren están enfadados porque cuando tienen que hacer un esfuerzo extra, trabajar más horas de las habituales, se les recompensa con Freddos, es decir barritas de chocolate. Pero también porque están observando cómo los responsables del equipo no son capaces de encontrar la dirección correcta para enderezar el rumbo de una escudería legendaria. Así lo cuentan en el Daily Mail, aunque un portavoz del equipo lo ha negado a As y después lo hizo Eric Boullier en rueda de prensa.
“El coche va mal y no saben como solucionarlo, pero tienen salarios de seis cifras. No lo entendemos. Hay cuatro directivos a los que llamamos ‘Los Intocables’, Eric Boullier, director de carreras, Matt Morris, ingeniero en jefe, Simon Roberts y David Probyn, de operaciones. La gente está empezando a boicotear los informes, nos gustaría ir a la huelga, pero la gente teme por su trabajo”, citan en Inglaterra a una fuente anónima.
Y es que, según algún periódico inglés, en McLaren los empleados preparan una especie de revolución por los malos resultados del equipo, algo que han negado a As fuentes de la propia escudería. “Se ponen esas barritas como también gorras o cosas por el estilo como un detalle para los empleados, pero no como premio ni nada y desde luego no hay revolución alguna, todo el mundo está trabajando muy duro en la misma dirección. Además, las puertas de los jefes siempre están abiertas para cualquier problema”.
Después Boullier también se refirió al asunto: “Han salido un par de historias divertidas de leer. Mucha gente nos ha escrito para preguntar si era una broma. Quizá haya un par de personas molestas en un equipo de 800, pero en toda organización tienes a empleados que están de acuerdo o en desacuerdo. No sé cuál es su problema. Les hemos invitado a que vengan para entenderlo mejor, para hablarlo, y veremos”.
El francés, máximo responsable deportivo del equipo, también ha asegurado que está dispuesto a seguir luchando: “No voy a dimitir. Todos nos responsabilizamos del rendimiento del coche. Llevo 20 años en las carreras, he ganado carreras y campeonatos con todos los equipos que he gestionado, también en Fórmula 1. No estamos donde queremos estar, no estamos contentos donde estamos”. Sin embargo, conserva la esperanza: “Pero tenemos a Renault como nuevo motorista y tenemos a gente de talento en el equipo. Simplemente tenemos que procurar identificar los problemas del coche y corregirlos. Sabemos dónde están los problemas del coche. Cuando crees en un concepto, tienes que desarrollarlo y estar seguro de acertar en la siguiente”. No obstante hay algunas fuentes que aseguran a As que el galo corre peligro al frente de la escudería de Woking.