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MOTOGP I GP DE CATALUÑA

Compadreo entre Lorenzo y Rossi por segundo podio consecutivo

El italiano no tuvo respuesta a la pregunta de AS de si podría ganar carreras con esta Ducati, y el español dio la cara por él.

Montmeló
Jorge Lorenzo, #99 (ESP) Ducati Team and Valentino Rossi, #46 (ITA) Movistar Yamaha MotoGP during the race of Catalunya GP, MotoGP 2018 World Championship on June 17, 2018 at Circuit de Barcelona in Montmelo, Barcelona, Spain.
Javier BorregoAFP7

Compadreo y buen rollo por segundo podio consecutivo entre Lorenzo y Rossi. Tal como sucediera en Mugello, en Montmeló volvieron a comparecer en la ceremonia de entrega de trofeos en calidad de primero (Jorge) y tercero (Valentino). En el cajón no tuvieron reparos en dedicarse aplausos y brindar juntos, detalle en el que también participó Márquez, cuya relación con Rossi en estas circunstancias vuelve a ser completamente fría, por ambas partes, desde lo acaecido en Argentina. Sin embargo, entre los dos excompañeros de Yamaha hay mejor feeling, sin llegar a ser amigos, y volvió a quedar constancia de ello en la rueda de prensa, con risas cómplices y apretón de manos espontáneo entre ambos.

As le preguntó al nueve veces campeón del mundo si, tras su mala experiencia en Ducati durante los cursos 2011 y 2012, rematados sin una sola victoria, sería capaz de ganar carreras con la actual Desmosedici. El Doctor sonrió y respondió escuetamente: “No lo sé. Es una pregunta difícil y creo que nadie lo sabe y que nadie lo sabrá nunca. La pregunta queda abierta”. El pentacampeón sacó la cara por él: “Creo que la Ducati de Valentino era más complicada, visto desde fuera. Para mí la de ahora es la Ducati más completa de todos los tiempos. Valentino es un gran piloto, ¿y por qué no? Bueno, un gran piloto no, es un campeón”. Esto último provocó la carcajada generalizada de todos los presentes y de ellos mismos, porque la forma en la que el español le mandó un zasca en toda regla a su jefe Claudio Domenicali el jueves de Mugello. Le dijo que no se olvidase de que no sólo es un gran piloto sino todo un campeón, por aquello del interés por fichar a Petrucci como relevo suyo, como así ha sido.

En la rueda de prensa de Mugello, tras la primera victoria del mallorquín con la Ducati, también hubo risas, colegueo y apretón de manos. A los pilotos siempre les acompañan los cascos en las ruedas de prensa, pero aquella vez también estaba la camiseta típica de las góndolas venecianas, azul marino con rayas blancas. Lorenzo había estado realizando un evento por allí en la víspera de la cita italiana y dijo que le había dado suerte, a lo que Rossi interpeló riéndose y asegurando que el problema era que ahora tendría que ir a la ciudad de los canales antes de cada carrera si quería volver a ganar. Lorenzo encajó aquella broma con simpatía y le pidió que le acompañara él cada vez que fuera, haciendo que todos nos riéramos con tal ocurrencia.

Ayer se les volvió a preguntar si podían ser amigos siendo rivales en la pista y Rossi repitió la teoría de otras veces, esa de que “es muy difícil ser amigo de otro piloto fuerte que es un rival, pero lo que sí resulta importante es que haya respeto, y lo hay”. Además, recordó que su relación “tiene ya muchos años, con altibajos, pero lo importante es que hay respeto”. Lorenzo es de la misma teoría.