Compareció muy enfadado Valentino Rossi ante los periodistas por el rendimiento de una Yamaha que no le permitió nada más que ser quinto, y un quinto favorecido por las caídas de Rins, Crutchlow, Pedrosa, Lorenzoy Dovizioso. De la de estos tres últimos repartió las culpas al 50 por ciento entre los dos españoles.
“Visto por la televisión, creo que la culpa está al cincuenta por ciento de Lorenzo y cincuenta por ciento de Pedrosa. Lorenzo ha ido largo y luego ha vuelto a la trazada habitual y no ve a Pedrosa. Luego Dani ha ido por su trazada y con la inclinación no ha visto a Lorenzo, por lo que no es fácil hacer un culpable, por lo que creo que mitad y mitad”, dijo El Doctor.
Sobre su situación, fue muy realista: “Podemos estar contentos con el quinto puesto ya que en circunstancias normales sin tantas caídas estaríamos mucho más atrás. Esto dice mucho de nuestras condiciones técnicas actualmente, lo que es preocupante. En algunos circuitos estamos mejor y en otros estamos peor. He hablado con Yamaha sobre donde está el problema y qué hay que hacer para mejorar. Ellos piden tiempo y están esforzándose al cien por cien, pero está pasando el tiempo y todavía no hemos resuelto el problema, por lo que espero que próximamente podamos solucionarlo”.
Al comentarle que se le veía enfadado, con Yamaha, Rossi dijo: “Estoy un poco frustrado ya que pasan las carreras, pasan los meses y no logramos avanzar con este tema. Hay que reaccionar ya que si no pasa otro año igual que el anterior y no es bueno. Aquí he conseguido muy buenos resultados y este año hemos terminado a más de ocho segundos, por lo que no es para estar contentos”.
Sobre posibles cambios en la M1: “Yo pienso que no hace falta hacer un cambio radical en la moto. Con dos o tres cosas sería suficiente. El lunes tenemos cosas que probar y espero mejorar un poco. Si Yamaha da el cien por cien espero dar ese paso que necesitamos. El problema está veinticinco por ciento las dos o tres piezas y un setenta y cinco por ciento en la electrónica. Yamaha nos ha prometido los máximos esfuerzos y confío en que en poco tiempo habremos mejorado ya que, luchar por un octavo en Jerez si no hubiera habido las caídas, no es positivo”.
Maverick se sentía igual que su compañero de escudería: “Estoy muy frustrado ya que es la carrera de casa y me hubiera encantado poder brindar a los fans un podio. De todas maneras, estar contento por un séptimo no es real. Estoy aquí para ganar y no para ser séptimo realmente, por lo que hay que seguir trabajando y pedir a Yamaha que mejore , es la única manera. He repetido muchas veces que el problema es la electrónica por lo que hay que trabajar en este tema e intentar mejorar.
Y al preguntarle si la solución está en buscar alguien nuevo que conozca el funcionamiento de la electrónica Magneti Marelli, dijo: “Es muy difícil de valorar y realmente no lo sé si eso es la solución. Esperemos que sea cual sea podamos mejorar ya que si no vamos a entrar en la dinámica de la pasada temporada y eso no es bueno”.
El año pasado los dos oficiales Yamaha pelearon por las dos primeras plazas hasta la última vuelta en Le Mans, el próximo escenario. Tendrán que solucionar los visibles problemas de agarre que sufren ahora para volver por sus fueros, máxime teniendo en cuenta el nivelazo de las Honda, las Ducati y las Suzuki.