Pedrosa refrenda la superioridad de Honda en Tailandia
Dani le ha arrebatado el mejor crono en el último suspiro a Zarco, al único que le va bien con la Yamaha. Márquez, Crutchlow y Rins acaban tras ellos.
Honda y Yamaha son una especie de Real Madrid y Barça. Dos vasos comunicantes con una rivalidad encarnizada, con lo que, lo que es bueno para el uno, es malo para el otro, y viceversa. Por eso, el estado de felicidad que se está instalando en las filas del ala dorada lo es aún más cuando comprueba la crisis que está atravesando la fábrica de los diapasones. Dani Pedrosa ha refrendado la superioridad de Honda en el test de Tailandia arrebatándole el mejor crono en el último suspiro a Johann Zarco, al único que le va bien con la M1. Además, Marc Márquez y Cal Crutchlow también han sido muy rápidos con la RC213V, terminando justo por detrás de los dos primeros y por delante de Álex Rins, que con su quinto puesto vuelve a ratificar en Buriram su buena pretemporada con la Suzuki.
Para encontrar a los dos pilotos oficiales de Yamaha hay que bajar hasta la octava plaza, en el caso de Maverick Viñales (a 0.493 de la cabeza, y hasta la duodécima en el de Valentino Rossi (a 0.730). Tanto uno como otro han mostrado síntomas de preocupación en la pista y fuera de ella, porque no se han cortado a la hora de contar lo que les pasa. Mack dice: “No encontramos dónde está el problema. Son ya tantos meses con el mismo problema... Es una sensación similar a la de 2017. No consiguen resolverla. Yo intento dar lo mejor de mí. Estuve utilizando la misma electrónica que usé ayer y no funciona igual. Tenemos un hándicap que no saben encontrar. Hay que buscarlo. Está claro que como piloto es difícil. Das muchas vueltas al día y sirven muy pocas. Hay que trabajar fuerte y seguir, al menos yo, mental y físicamente concentrado y esperar a que todo funcione".
Para Honda la historia es muy diferente. El prototipo de 2018 está mucho mejor ‘parido’ que el de las dos temporadas anteriores y ya se sabe cuál fue el resultado final entonces (dos títulos de Márquez). Este año, además, Pedrosa está desatado y su ataque final al crono ha hecho cambiar titulares que ya hablaban de Zarco como el más rápido del test tailandés. El español ha hecho a muy pocos minutos del final 1:29.781, que es 86 milésimas más rápido que el tiempo de Zarco. Márquez, que no ha podido superar su registro del día anterior, se ha quedado a 0.188 de su compañero en el Repsol Honda. Crutchlow ha terminado a 0.283 y Rins lo ha hecho a 0.397.
El segundo quinteto hasta completar las diez primeras plazas lo integran Miller, Dovizioso, el citado Viñales, Petrucci y Nakagami, que ha sido el mejor de los novatos en este test. Más atrás han terminado Rabat 11º, Aleix 14º, Lorenzo 16º (+0.948) y Bautista 17º.
Capítulo aparte merece el análisis de Ducati. Dovizioso ha dicho que los tiempos no reflejan la realidad, y sólo él sabrá por qué lo dice. Lorenzo, sin embargo, ha dejado claro que en el Chang International no ha ido tan cómodo como en el test de Sepang y asegura que para Qatar deberán recuperar el prototipo de 2017 para compararlo con el 2018, cuyo nuevo chasis y motor son mejores para algunas cosas, pero peor para otras.
En la comparación con Ducati también sale claramente vencedora Honda, porque Márquez ha rodado con un nuevo basculante de carbono que funciona y se ha marcado un simulacro de carrera de 21 vueltas a muy buen ritmo. Sin duda, si el Mundial empezara mañana, los del ala dorada serían los claros favoritos, aunque aún queda otro test en Qatar y, además, el año pasado el gran dominador del invierno fue Maverick y luego no pudo con Márquez.
Por cierto, la anécdota del día ha estado en la aparición de una bandera roja en los primeros instantes de la jornada por la presencia de una serpiente en una curva del Chang International circuit de Buriram. Un comisario de pista la ha retirado con una tranquilidad pasmosa. Algunos nos acordamos de Gino Borsoi y su cobra en Malasia.