Eau Rouge vibra con el Tour de Francia mientras espera a la F1
La famosa curva del circuito de Spa se llenó de aficionados en el paso de la tercera etapa de la ronda gala dejando una imagen para el recuerdo.
Ponerse al pie del piano, echar la vista abajo y ver como los protagonistas ascienden su 10% de pendiente. Eso es algo que en la Fórmula 1 está prohibido hacer desde hace décadas, pero que se ha vuelto a ver en la legendaria curva de 'Eau Rouge' gracias a la competición ciclista más importante del mundo: el Tour de Francia. La tercera etapa de la ronda gala atravesaba en su kilómetro 22 el circuito de Spa Francorchamps dejando una imagen para el recuerdo con la subida de su famosa curva plagada de aficionados.
Los monoplazas de F1 llevan 49 años pasando por ahí a más de 300 km/h desafiando las leyes de la gravedad, pero la cercanía que permite un deporte como el ciclismo dejó una bonita estampa que la organización del Tour no desaprovechó en utilizar por sus redes sociales. "Seis coches en el grupo delantero", escribían mientras los escapados en los primeros compases de la etapa encaraban la subida a 'Eau Rouge' y, más tarde, eligieron una instantánea de la subida del pelotón por la zona como la imagen del día.
Fue algo único, pero no es la primera vez que se produce esta comunión entre dos de deportes que mueven masas. En la década de los 80 el recorrido del Tour también pasó en un par de ocasiones por el trazado de Spa. En 1980 se disputó una crono individual y en 1989 se dio varias vueltas al circuito hasta concluir en él. Bernard Hinault y Raúl Alcalá ganaron aquellas etapas, Peter Sagan se impuso a una pierna en esta. En mes y medio la F1 estará allí con su duodécima carrera del año, mientras, Spa y Eau Rouge vibraron con el Tour.