Enorme Márquez, resurrección de Lorenzo y fiasco de Maverick
El campeón se adapta mejor que nadie a la nueva chicane y ha liderado con 0.405 sobre el de Ducati, que aquí sí tiene confianza. El líder sólo ha sido 17º a 1.515.
Cuatro cambios de líder ha habido en los últimos cinco minutos del entretenido FP2 de MotoGP en Montmeló. A 5:21 se ha puesto primero Bautista, a 2:58 lo ha hecho Pedrosa, a 2:04 Lorenzo y a 1:11 Márquez, que con el tiempo cumplido ha vuelto a rebajar su crono para establecer definitivamente como el más rápido del día el 1:44.295. Y eso es 1.6 mejor que lo que ya había marcado por la mañana, con la pista aún mojada en la primera parte de la sesión, y se queda cerca del 1:43.803 que firmó en el test de aquí hace tres semanas.
Marc siempre se ha adaptado más rápido que la competencia a los cambios o a los trazados nuevos, por eso no es de extrañar que el campeón marque la diferencia en la nueva chicane del cuarto sector, la que se ha puesto para evitar el paso por la curva en la que Luis Salom se cayó fatídicamente el año pasado. Se le ve tan suelto por allí que no le ha importado en su vuelta rápida incluso el hecho de encontrarse en medio de la pista la Ducati recién caída de Baz. Aún así ha logrado mejorar su crono. Sin embargo, horas después se ha sabido que al ilerdense le quitaban ese crono por no cortar gas con doble bandera amarilla, pero en cualquier caso sigue al frente porque su segunda mejor vuelta también es mejor que la de los demás.
Sanción similar han tenido Pedrosa, Zarco, Maverick y Rabat, lo que ha provocado algunos cambios en la clasificación. En cualquier caso, tiene motivos para estar contento el jefe de filas del Repsol Honda, porque hacía tiempo que no comenzaba con tan buen pie un gran premio. Su ventaja respecto al segundo ha sido finalmente de 222 milésimas, y no es un piloto cualquiera el que ocupa esa segunda plaza... Lorenzo ha hecho 1:44.700, que está a 702 milésimas del mejor tiempo que él mismo selló en el trazado catalán en el citado ensayo. Si le dieran la opción, seguramente el mallorquín firmaría esta posición en la carrera, porque un segundo para él ahora es un triunfo y un pasito más hacia la ansiada victoria. En Mugello naufragó con la octava plaza, pero no pierde ni la fe ni la calma en busca de una confianza que acabará llevándole a lograr buenos resultados también con la Ducati.
El tercero ha sido un sorprendente Folger, más sorprendente si cabe al ver la debacle de los dos oficiales Yamaha. Y es que Rossi sólo ha podido ser noveno y Maverick ha terminado en una preocupante decimosexta plaza, a 1.332 de la cabeza. Se ha visto muy enfadado al líder en su box y habrá que estar atentos a sus explicaciones. Tiene pinta de que en el Movistar Yamaha estén echando en falta el entrenamiento que realizaron sus rivales o bien, y casi peor, que los Michelin sean aquí un lastre para las M1 como lo fueron para las RC213V en Mugello.
En la hitpotética segunda fila, Dovizioso, Petrucci y Zarco. Completan las diez primeras plazas, Pedrosa, Bautista, el mencionado Rossi y Barberá. El valencino es uno de los que se ha caído, como su compañero Baz, Bautista y Crutchlow, que se ha pegado un buena carrera para llegar al box, aunque ya sin tiempo para volver a la carga. Aleix ha sido 13º y Pol 21º.