Rossi encumbra a Viñales y reza porque no mejore a Lorenzo

"Es muy agradable ser Valentino Rossi, pero es agotador". Así empieza el piloto de Yamaha la entrevista que le hace 'La Gazzetta dello Sport'. 2017 será la 22ª temporada mundialista del italiano, la 16ª en MotoGP, y cuando la comience en Sepang lo hará con 38 años. Cada vez el tiempo pesa más, pero aún está "bastante lejos de estar deprimido". Su ambición aún no ha dicho basta, mientras la mantenga intacta querrá perseguir ese décimo título que se le resiste. Este año será especial con tanto cambio de piloto y en el que hay tantas dudas.

"Tengo muchas dudas antes de empezar, pero es energía positiva, sirve para no relajarse demasiado", asegura El Doctor. Que su nuevo compañero en Yamaha es una seria amenaza a su status de líder en el equipo azul es una certeza, lo que no sabe Rossi es si Maverick le dará los mismos o más problemas que su anterior vecino de box: "Con Viñales será una bonita lucha. Esperaba que fuera un poco peor que Lorenzo, pero de inmediato fue fuerte, y ahora espero que no sea incluso mejor que él".

Mack avisó de sus intenciones en Valencia y tiene expectantes a todos, lo mismo que el propio Jorge y lo que puede hacer a lomos de la Ducati. "Tengo curiosidad por ver cómo va, ver si es competitivo será una de las cosas interesantes de este año", dice sobre el rival que intentará tener un mejor paso por Borgo Panigale que el que tuvo él y que le amargó en 2015, una dura derrota que no aceptó a pesar de que diga que ahora es mejor perdedor que cuando empezó: "Es más fácil aceptar la derrota, seguramente hace 15 años era más difícil".

Aunque tenga experiencia para repartir el resto de su vida, competir para el 46 cada vez es más difícil. Según crece su leyenda aumenta la dificultad: "Al hacerte más grande todo se vuelve más difícil y para obtener los mismos resultados tienes que luchar aún más. Pero el esfuerzo es más sobre lo que hay alrededor: viajes, aeropuertos, zonas horarias, los fans... En un gran premio también tienes que encontrar tiempo y energía para hacerte fotos, firmar autógrafos y demás, incluso en momentos en los que tienes prisa por hacer otra cosa".

Eso sí, aclara que el día que su trayectoria llegue a su fin "depende de los resultados", de nada ni de nadie más: "He tenido rivales muy fuertes y nunca me ha parado nadie. Así que creo que no va a ocurrir ahora, o al menos eso espero". Ahora, tiene claro lo que quiere dedicarse una vez deje la competición: "Trabajar con mi equipo y hacer correr a los jóvenes". Y también tiene tiempo para hablar de mujeres: "Una chica hermosa es la única que puede darte algo parecido a lo que sientes al ir en una MotoGP al límite". Una sensación que compensa todo agotamiento.