Alonso cuenta por abandonos la mitad de sus carreras de 2016
A excepción del de Australia, por el accidente que tuvo y que le dejó sin correr en Barhein, el resto ha sido por problemas con su McLaren.
Un disgusto más. Otro. Su historial desde que regresó a McLaren no deja de llenarse de borrones. Sin respiro. Este año, el segundo de la asociación del equipo británico con su viejo socio Honda, se suponía que iba a mejorar las cosas. Está siendo así, imposible que no lo fuera tras el desastre que protagonizaron en 2015, pero no tanto como debería. Eso salta la vista al repasar los resultados que lleva Alonso en el Mundial 2016: la mitad de las carreras que ha disputado no las ha terminado.
Cierto, lleva más puntos que el año pasado a estas alturas, no podría ser de otro modo cuando sólo sumó uno, pero los 18 que atesora se antojan muy escasos para el hambre del asturiano y de la formación de Woking. Sólo ha sido capaz de acabar en el Top 10 en dos citas, Rusia y Mónaco, y en otras dos ocasiones, España y Canadá, empezó con claras opciones de hacerlo tras calificarse en la Q3, pero ya fuera por su MP4-31 o por su equipo (en Montreal le condenaron seis segundos extra en boxes) no pudo hacerlo.
De los cuatro abandonos en sus ocho carreras sólo uno no fue por culpa del McLaren, el primero, aquél de Australia cuyas imágenes inundan los malos recuerdos de forma irremediable. Ese accidente le dejó sin poder competir en la siguiente cita de Bahréin, en la que Stoffel Vandoorne le sustituyó acabando décimo. Su segunda retirada llegó en la cita de casa, en Montmeló, cuando la unidad de potencia de su coche dijo basta arrebatándole todas las opciones que tenía de volver a sumar algún punto.
El siguiente lo padeció en la penúltima cita de Bakú. De nuevo fue apartado de la lucha por conseguir algo decente después de que su caja de cambios empezara a fallar tras su segunda parada convirtiéndole en una chicane móvil fácil de adelantar por mucho empeño que le pusiera (como hizo con Grosjean). Al final, entró a boxes para retirarse. Y su último y cuarto abandonó llegó en Austria con problemas en el ERS. 50% de sombras para Alonso en 2016. Así será difícil verle sonreír en un McLaren...