Márquez también se alinea contra las alas por la seguridad
"Al principio hacían gracia, porque eran pequeñitas, pero se está llegando a un extremo que a mí no me gustan y una moto es más bonita sin alas", dice.
La de Marc Márquez no es la primera voz crítica que surge contra las alas en las MotoGP, y eso que este año las Honda oficiales también comienzan a llevarlas. Cal Crutchlow las calificó de peligrosas en la cita inaugural de Qatar y su compañero Dani Pedrosa es de la misma teoría. Se han prohibido ya para Moto2 y Moto3, pero sí están reglamentadas para la clase reina y el tetracampeón opina así de ellas: "Al principio sí que hacían gracia, porque eran pequeñitas, pero se está llegando a un extremo que a mí no me gustan".
Lo de que las alas están reglamentadas desde este año no es broma y deben estar fijadas en el carenado sin sobrepasar la altura del manillar ni tampoco exceder la anchura máxima reglamentaria de la moto. Asimismo, la curvatura del borde de ataque deberá tener un radio mínimo de 2,5 mm. El diseño ya es cosa de cada uno, y los hay de todo tipo. Las que incorpora la Yamaha de Lorenzo, por ejemplo, son enormes y parecen más unas bandejas para llevar el aperitivo que unos apéndices para ganar en aerodinámica y asentar la rueda delantera contra el asfalto, pero a él le van bien.