A Honda le gusta Álex Rins como apuesta de futuro

Con la mayoría de los sillines importantes asegurados por contrato hasta finales de 2016, el mercado de fichajes para esta temporada dependía en gran medida de lo que hiciera Lorenzo, que optó junto a Yamaha por seguir como estaba una temporada más. Aquel anuncio llegó en Jerez, el cuarto gran premio del curso, y desinfló los dimes y diretes, pero quedan aún cabos sueltos, y de los importantes, por atar en MotoGP. Buscando qué puede pasar con Pol, que está preparando su siguiente paso, y con Rabat, que perfila estos días cómo dar su salto a la clase reina, todo apunta a día de hoy a que no habrá más renovaciones para Pedrosa en el box del Repsol Honda, que el ala dorada está muy pendiente de acertar con el sustituto del catalán y que Rins es un piloto que gusta mucho para ser en un futuro no muy lejano el nuevo compañero de Márquez.

Del que más se habla en el paddock siempre como futurible de HRC es de Maverick Viñales, pero Suzuki estuvo más rápida que sus rivales firmándole por tres años, siendo un novato de Moto2, y entre marcas japonesas no se quitan pilotos con contrato en vigor en base a una especie de pacto de caballeros, no escrito, pero que todos respetan.

A Rins, que ha firmado grandes actuaciones en su debut en la categoría intermedia, ya le quiso el año pasado Yamaha. La propuesta era saltar directamente de Moto3 a MotoGP, a lo Miller con Honda, para enrolarle en el equipo satélite del Tech 3 en el que militan Pol Espargaró y Bradley Smith. La idea del catalán es cumplir los dos años de contrato que tiene con el Páginas Amarillas HP 40 de Sito Pons, pero a nadie le amarga un dulce y saber que está en el punto de mira de HRC podría hacer cambiar cualquier plan previsto llegado el caso. El discurso oficialista de HRC es que repitan la próxima temporada Márquez y Pedrosa, cumpliendo así ambos sus dos años de contrato, pero son muchos en el paddock los que no descartan que Dani pudiera cambiar de aires antes por falta de resultados.

Además de Rins, HRC también está pendiente de la evolución de Álex Márquez en Moto2, porque sería ideal poder juntar a los dos hermanos de Cervera en el mismo box, pero para eso haría falta que el pequeño vuelva a ser el que consiguió el título de Moto3 el año pasado. Y en eso está el bueno de Álex, sin importarle los cantos de sirena de la clase reina, que ahora mismo le quedan más lejos que al otro Álex, Rins.