Luis Salom: "No tengo presión. Tengo más ganas"

Alex Rins afrontará este jueves el pistoletazo de salida a su aventura en el Mundial de Moto2, un salto a una categoría que reconoce le "gusta más que la del año pasado" y, a pesar del desafío que supone además llegar a un nuevo equipo, el Páginas Amarillas HP 40, se muestra "contento del cambio", "sin prisa" por alcanzar el éxito y muchos motivos para ser optimista.

"Es un poco complicado cambiar el chip. Yo llevaba siete años en el equipo anterior pero me he sentido muy arropado en este nuevo equipo. La adaptación ha sido muy buena tanto con la moto como con los integrantes del equipo, así que estoy contento del cambio", reconoció en una entrevista con Europa Press, durante un acto promocional con 'STIHL', patrocinador de su equipo.

Rins, con una altura cercana a los 180 cms, es sabedor de que el cambio le conviene y reconoce lo largo de la espera y su ilusión. "Se me ha pasado un poquito lento (el invierno) con las ganas que tengo de subirme a la Moto2, que es una moto que me gusta más que la del año pasado. Es más grande, nunca había probado una moto de estas, pero la verdad es que me gusta", explicó.

Debutante este año en la categoría intermedia, el catalán destacó una buena adaptación a su nueva 'compañera' durante la pretemporada. "No ha ido mal la adaptación. Hemos estado adaptándonos a la moto, probando cosas diferentes. Empezamos con un 'setting' muy base y poco a poco lo hemos ido adaptando a mi nivel, a mi forma de conducción", apuntó.

Rins se presenta así como novato de Moto2 pero con una larga experiencia en Moto3, categoría en la que estuvo tres años y le dejó la 'espinita' clavada de no ser campeón del mundo por una curva. "Rencor (a Moto3) un poquito de no haber sido campeón del mundo pero por el resto estoy contento", confesó.

"He crecido mucho como piloto, he mejorado tanto dentro como fuera de la pista y la verdad es que no me arrepiento de nada de lo que he hecho", añadió, antes de explicar cómo se gestiona siendo un joven de 17 años quedarse a las puertas del éxito. "La gente que vale de verdad es la que está en los buenos y malos momentos", indicó sobre aquel desenlace en Cheste hace dos años.

"Este año ha sido un poco duro, a nivel de resultados no ha sido el más bueno pero es de agradecer a la gente que ha estado a mi lado apoyándome en los malos momentos. Esta temporada pasada ha habido un par de ellos", afirmó, recordando más el recién Mundial de Moto3 2014 en el cual quedó en tercera posición por detrás del que fue su compañero, Alex Márquez, y de Jack Miller.

A pesar de ser el mejor debutante de Moto3 en 2012 y rozar el título en 2013, Rins llega ahora "sin prisa" a un nuevo desafío, aunque encuentra mucha "motivación" en el equipo de Sito Pons. "Soy muy joven y voy paso a paso", apuntó a Europa Press antes de referirse a su nuevo compañero, Luis Salom. "No hemos hablado de pronósticos. Conozco a Luis desde hace dos años, en 2012 y 2013 coincidimos en Moto 3 y es un piloto muy bueno", confiesa.

"Espero pelear como en 2013 y de él no lo dudo. Tiene el nivel para estar ahí delante. Ha hecho un cambio con respecto al año pasado y espero estar a su altura. Todo me va bien. Tener a Luis de compañero es como años atrás que tuve a Márquez. Normalmente al primero que quieres batir es a tu compañero de equipo y quieras o no eso también está en juego. Es una motivación", agregó.

Por último, Rins advirtió de lo igualado de la categoría e insistió en no ponerse objetivos a corto plazo. "Moto2 es una categoría muy igualada, los motores son los mismos. Quizá la diferencia con Moto3 la hace un poco más el equipo con el piloto, así que habrá que estar concentrados y trabajar duro. No quiero prisa, me queda mucho por recorrer y aprender", concluyó.

Luis Salom apunta alto en su segunda temporada en Moto2 con el Páginas Amarillas HP 40, pero sin "ningún tipo de presión", con "muchas ganas de demostrar el trabajo" hecho desde que terminase el pasado Mundial y el objetivo de estar "cada carrera delante" en una categoría en la que será "complicado marcar la diferencia".

"No tengo ningún tipo de presión. Tengo más ganas que presión. Ganas de que empiece y de poder demostrar el trabajo hecho durante el invierno. Al fin y al cabo he trabajado bastante durante este invierno y espero que se note", señaló Salom en una entrevista a Europa Press, tras un acto con la compañía alemana STIHL, patrocinador de su equipo.

El balear tiene hambre y su ambición es lógica después de su adaptación a la categoría intermedia el año pasado. "La verdad es que el año pasado no fue demasiado bien. Sí que conseguimos podios pero no fue lo que yo esperaba", confesó.

Tras la toma de contacto, resulta inevitable poner en las quinielas a un Salom que ya deslumbró en Moto3. De hecho, en 2013 -precisamente segunda temporada en Moto3-- firmó "una temporada casi perfecta", en la que por segunda ocasión consecutiva rozó el Campeonato del Mundo. Ahora, con la adaptación superada, la lección aprendida y el trabajo y soporte del equipo que dirige Sito Pons, el mallorquín inicia un asalto que puede ser definitivo.

"Para mí el objetivo es intentar estar ahí, cada carrera delante. No perder el norte. Intentar no 'pinchar' en ninguna carrera porque es lo que te ayuda siempre al final de temporada. He intentado trabajar durante todo el invierno para encontrar esa mejora, pero donde coges el nivel fuerte es en las carreras", afirmó.

Ya en 2014, a pesar de que "fue un poco más desastre" que años anteriores y con "varias lesiones" que no ayudaron, la temporada terminó con buenas sensaciones para el piloto balear. "En Malasia, a pesar de que me quedé último en la primera vuelta porque me toqué con un piloto acabé el once. Después en Valencia conseguí el cuarto puesto y eso ayuda", explicó.

"Todo el mundo está con muchas ganas y es normal. Son muchos meses sin carreras y eso se nota", añadió un Salom que recuerda que en Moto2 apenas hay margen para el descuido. "Son muchos rivales los que hay en esta categoría y no te puedes concentrar nunca en uno. Si te desconcentras un poco te pasan 10", sentenció.

Salom reconoce tener la seguridad de un equipo que marca la diferencia con la presencia de Alex Rinx. "Alex hará una buena temporada y es un equipo con una estructura muy buena. Eso es un paso que tenemos de ventaja. La verdad es que hay pocos equipos con este nivel, pero al fin y al cabo en Moto2, hoy en día, casi todos los chasis son Kalex, los motores son exactamente igual para todos y es complicado marcar la diferencia", concluyó.