Lewis Hamilton: “Trabajaré muy duro para emular a Senna”

Lewis Hamilton es el hombre de moda en la F-1. No sólo por ser el vigente campeón, sino porque su cotización ha aumentado tras su excepcional temporada al volante del invencible Mercedes con el que ha conseguido once victorias, siete poles, dieciséis podios y siete vueltas rápidas. El británico de 29 años, único piloto en activo que ha ganado el título con dos equipos diferentes, ha pasado a formar parte del selecto club de los bicampeones siendo su séptimo miembro.

Pero Hamilton no quiere detenerse ahí y ya piensa en subir a otro piso todavía más VIP, el de los tricampeones, donde figura su ídolo de la infancia, Senna, junto a Brabham, Stewart, Lauda y Piquet: “Siempre he querido emular a Ayrton, así que ahora que tengo el segundo Mundial, voy a trabajar muy duro para lograr el tercero”, afirmaba el británico tras ser reconocido con un doble galardón en los premios de ‘Autosport’.

La madurez del piloto de Stevenage unida a su recuperada humildad y a estar completamente centrado en su profesión han hecho de él un Hamilton más fuerte: “No mucha gente consigue ganar Mundiales pero, si tengo una oportunidad de volver a hacerlo, me aseguraré de estar bien preparado”. Además, el británico reconoce que el título de este año ha sido más satisfactorio que el de 2008 con McLaren: “Este segundo título es el más especial e importante para mí, especialmente después de todo por lo que he pasado, sienta mucho mejor que el primero y lo estoy disfrutando más. El coche en llamas, los trompos... No ha sido un año fácil, la verdad, pero por lo que más feliz me siento es por haber hecho las cosas de la mejor forma. Sentía que había estado empujando muy duro y por eso fue más complicado llegar a la última carrera con el título todavía en juego”.

Finalmente, Abu Dhabi lo coronó en detrimento de su compañero Rosberg y Hamilton certificó lo que había demostrado desde Australia, que había sido el mejor. Por supuesto, en gran medida gracias a contar con un aliado invencible, al igual que Nico, el W05. El monoplaza de Mercedes no ha tenido rival y ha dado a la dupla del equipo de Stuttgart la posibilidad de luchar sin más invitados con opciones.

Una auténtica guerra, como reconoce Lewis. “Conocí a Nico en 1997 cuando corríamos en los karts, vivimos años increíbles y luego seguimos caminos separados perdiendo algo el contacto. Este año con el mismo coche y el título en juego hemos tenido una batalla mental con momentos increíbles. Éramos mucho mejores amigos entonces que ahora, eso seguro”, dijo riendo, pero explicando mejor que nunca la realidad del box de plata en 2014.

Por último, Hamilton ensalzó a su escudería y, por ende, al coche que han construido: “Es el mejor equipo y tenemos pensado seguir siendo los mejores también el año que viene. Hay mucho trabajo en marcha y tengo toda la fe puesta en ellos. Estaremos a tope. No se trata de que seamos campeones y de llegar en 2015 como tales. Todo empieza de nuevo después de esto, queremos ser incluso mejores el año que viene. Por eso, debemos ser humildes”.