“No vimos intención en las acciones de Jack Miller”

Había muchas caras conocidas en el aeropuerto de Kuala Lumpur al arrancar la madrugada del lunes. Pilotos, mecánicos, miembros de la organización y periodistas partían desde Malaisia rumbo a Europa, tras tres intensas semanas transoceánicas, saldadas con los títulos de Marc Márquez, en MotoGP, y de Tito Rabat, en Moto2. Entre espera, para facturar, espera, para el control de pasaportes, y espera, para subir al fin a los aviones, mucha conversación y un asunto estrella: la carrera de Moto3 en la que Jack Miller le había buscado las cosquillas a Álex Márquez hasta en seis ocasiones y si Dirección de Carrera había acertado al no tener en cuenta la doble reclamación del equipo español.

Había opiniones para todos los gustos, pero lo que al final cuenta es que el resultado siguió siendo el ya conocido, sin un solo punto de penalización para el australiano ni para Kent, al que también se le reclamaba por el tapón que hizo en la última vuelta al pupilo de un Alzamora que acabó enfadadísimo pese a la victoria de Marc en MotoGP.

“Las reclamaciones han quedado en nada. La primera, contra Miller, porque ninguno de los adelantamientos eran punibles. Y en la segunda, contra Kent, hemos analizado su telemetría y en las curvas 5 y 6 abrió gas antes que en las últimas vueltas y ‘perdió’ la rueda trasera, por lo que se ve obligado a cortar gas. Nada más”, explicó a este diario Javier Alonso, representante de Dorna en la Dirección de Carrera.

Había que preguntar si vieron o no vieron intencionalidad en las maniobras del australiano, que es lo que otras veces han sancionado: “El que repase otra vez la carrera verá que es verdad que Miller entra y frena tarde, y también que alguna vez se va largo. Eso no lo negamos, pero cada piloto tenía una estrategia distinta, van sobre motos diferentes y hay curvas que hacen en marchas distintas y trazan diferente. Nosotros no vemos intención de Miller en sacarle o tirarle y si la hubiéramos visto habría habido sanción”.

Es curioso que las seis veces que el de KTM se fue largo en la frenada de la primera curva siempre fuera a parar contra Álex, sobre todo teniendo en cuenta lo numeroso que llegó a ser el grupo de cabeza (hasta ocho pilotos por momentos). Miller estaba a veinte puntos del español y le convenía la carrera lenta que planificó, lo que es muy lícito, para meter pilotos entre él y su rival. Así consiguió irse a sólo once de distancia y con vida para la carrera de Valencia, donde un primero suyo y un cuarto de su rival le harían campeón.

Dirección de Carrera espera que la batalla en Cheste sea sólo deportiva y en Sepang no tenían intenciones de reunirles antes de la batalla, como han hecho otras veces casi siempre con pilotos de la categoría pequeña. “No vamos a reunirles. Entendemos que son lo suficientemente inteligentes los dos para no meterse donde no toca. Entendemos también la posición de Álex, porque ha perdido puntos en la pelea por el campeonato, pero también la de Miller”, aseguraba Alonso antes de reconocer que no estaba al tanto de la altanería que había soltado el australiano nada más acabar la carrera: “Álex no se puede quejar porque es un especialista en los toques”. O esta otra perla: “He corrido como los Márquez”. Todo ello resentido por lo que él entiende una jugada sucia de su rival en Aragón, donde se fue al suelo en disputa contra él. “En el circuito no estábamos al tanto de lo que había dicho Miller y si dice tonterías le pediremos que no las diga”, remata el hombre de Dorna en Dirección de Carrera.