Marc Márquez conquista su pole más cara de la temporada

El amago de lluvia al arrancar los entrenamientos oficiales quedó en eso, en amago, en unas simples gotas durante la tanda oficial de Moto3 que no afectaron lo más mínimo a los pilotos de MotoGP llegado su momento. Lo que sí fue noticia, negativa, fue el accidente de Valentino Rossi en los compases finales de la cuarta sesión libre de Brno…

El campeonísimo se fue al suelo al perder la rueda delantera en la frenada de la curva 11, a la que según información de Brembo se llega a 248 por hora y se reduce hasta 127 para afrontar la primera variante, de izquierdas, de esa chicane. Sólo unas milésimas después se caía también en el mismo punto Bautista, cuya Honda no embistió al italiano de puro milagro. Tuvo suerte El Doctor, porque esa RC213V era un auténtico proyectil buscando diana, pero no la suficiente como para evitar que en el arrastrón se abrasara el dedo meñique de la mano izquierda. Hubo de visitar la clínica y aparecieron las caras de preocupación en su box, porque se temían algo más grave. Las caras sólo se destensaron al saber que sólo era abrasión, que no era fractura y que podría salir a la Q2.

Una pena, porque en el FP4 marcó un 1:56.207 que suponía el mejor tiempo del fin de semana en los libres, aunque más lento de lo que llegaría a rodarse en la Q2, a la que accedieron Bradl y Hernández desde la Q1.

El cuarto de hora decisivo para la configuración de la parrilla se saldó con la novena pole de la temporada de Márquez y, visto lo visto, tal vez fuera la más trabajada de todas, porque hasta en tres ocasiones se la tuvo que jugar para ser el primero de la tabla de tiempos. El líder fue el primero en bajar de la barrera del 1:56 y repitió otro 1:55 tras pasar por boxes, pero esta vez con Iannone pegado a su rueda, arrebatándole la pole provisionalmente por sólo tres milésimas. Para unos es una acción de chuparruedas, y para otros, de pillo, pero sea como fuere a Marc le acababan de quitar la pole y no estaba dispuesto a consentirlo. Le quedaba una última vuelta y, a pesar de que el italiano intentó engancharse de nuevo a él, tiró a muerte y volvió a bajar el tiempo de todos, con un 1:55.585 que ya resultó insalvable para los demás.

Le acompañarán en la primera fila Dovizioso y el citado Iannone, que tuvo la decencia de decir que Márquez le había ayudado “un poquito” a lograr su tiempo y de dar las gracias a Ducati, que metió así dos de sus motos en la primera fila. La segunda la abrirá Smith, que tendrá a su lado a Pedrosa y Lorenzo. En la tercera, Rossi, Bradl y Pol. Y la cuarta, Aleix, Crutchlow y Hernández.