Schumacher cumple 45 años mientras lucha por su vida

Cuando cumplió los 25, Michael Schumacher era ya un piloto consolidado en la Fórmula 1 que soñaba con un título mundial que le llegó por primera vez ese año, en 1994; una década después, celebró los 35 con su sexta corona y justo antes de conseguir la séptima y última en 2004. Hoy todo es muy diferente... No podrá disfrutar de su 45 aniversario, postrado en una cama del hospital de Grenoble, desde donde lucha por poder celebrar muchos más superando las consecuencias de su grave accidente de esquí del pasado domingo.

Ayer no hubo noticias sobre la evolución del piloto alemán, lo que no deja de ser un buen síntoma dentro de la prudencia que exige su gravedad. Los neurólogos ya advirtieron que el tiempo juega a su favor, al menos en lo que se refiere al primer y único objetivo que se plantean ahora, que no es otro que su supervivencia.

Y en ese sentido, la estabilidad en el coma inducido en el que se encuentra invita a pensar que lo peor pueda haber pasado, aunque todavía sea pronto para pronósticos certeros. Hay quien ya se preocupa por las secuelas que las lesiones cerebrales pudieran producirle a Schumi, pero ésa es una fase de su recuperación (larga incluso en el mejor de los casos) que no es momento ni siquiera de plantearse.

Mientras, el control y seguridad a las puertas del hospital son máximos. Para la fecha de su cumpleaños se espera una afluencia masiva tanto de medios de comunicación como de seguidores de Schumacher. Por ese motivo, la dirección del centro médico decidió desplazar a la Prensa a una zona aledaña, a la espera de que se emita un nuevo parte médico, presumiblemente hoy mismo y ante la llegada del fin de semana. Ojalá continúen las buenas sensaciones...