Boullier alerta de los peligros de una escalada en los sueldos

Eric Boullier está haciendo un sensacional trabajo al frente de Lotus. Cuando heredó la estructura de Renault parecía que el potencial del equipo podría resentirse; sin embargo, Boullier ha sido capaz de colocar a su escudería como una de las grandes de la parrilla, con pilotos solventes y un monoplaza competitivo que aparece de forma habitual en los puestos de vanguardia de los grandes premios.

Y Boullier parece tener muy claras cuáles deben ser las prioridades en la Fórmula 1. Por eso alerta de los riesgos que acarrearía que las escuderías entraran en una guerra de sueldos por hacerse con los servicios de los ingenieros o los técnicos. “Creo que sería una locura entrar en una guerra de dinero, empezar a pagar disparates a tus empleados” ha declarado a 'Autosport'. Y argumenta su teoría: “En la F-1 hay muchos riesgos, es muy exigente, se está muy expuesto. Hay sueldos muy altos, en ocasiones más que en ninguna otra industria, pero ¿realmente para qué? Para mí lo realmente importante es la empresa, es lo primero, no tener que pagar unos cientos de miles de libras más para mantener a un empleado”.

Y pone el caso concreto de James Allison, a quien durante la pretemporada se le vinculó con McLaren y pareció estar muy cerca de abandonar Lotus: “James no es, obviamente, el único trabajador de Lotus, tenemos 150 más y la mayoría de las ideas no vienen de él. Está claro que su trabajo es una ventaja para nuestro equipo, pero también sabemos que si él se va algún día, sobreviviremos”.