Fernando Alonso toma el mando en los test de Barcelona

A pie de pista impresionan varios coches, uno de ellos es el Red Bull, otro el McLaren y más allá de las evidencias esperadas está el Lotus, atentos al Williams, y sí... también el Ferrari. Al menos en las manos de Fernando Alonso, cuando ves llegar el coche rojo a la curva ofrece sensación de poderoso. El asturiano ha demostrado en su último día de estas jornadas de test en Montmeló que su monoplaza italiano es rápido con el mejor tiempo. Lo logró con gomas blandas, pero como el resto de los primeros.

Alonso se ha quedado en un 1:21.875, a milésimas del 1:21.848 que consiguió ayer Sergio Pérez con el McLaren, aunque hoy la pista estaba mucho más fría, la temperatura ha caído considerablemente en el circuito de Montmeló. Tras el doble campeón español se sitúa Nico Hulkenberg con el Sauber a tres décimas y justo después Romain Grosjean con su Lotus, el francés incluso estuvo a punto de quitar el mejor tiempo a Alonso a poco de finalizar la mitad de la jornada, pero finalmente no pudo en el último sector.

Hay que considerar importante el simulacro de carrera del Williams de Pastor Maldonado en el tercer día del coche en pista. Por la tarde, se esperaba que lo hiciera Fernando, pero se limitó a tandas largas, sí lo hicieron con buenos resultados y cinco paradas Mark Webber, con el Red Bull, y Romain Grosjean con el Lotus.

Y para el optimismo un dato. Alonso logró un balance de tiempos similar al de Vettel ayer, pero finalmente el registro más rápido del español fue tres décimas más veloz que el del alemán. Es un dato. Alonso se despide hasta la próxima semana de la pista, con buenas sensaciones y mucho trabajo por hacer, con este Ferrari no debería sufrir tanto. Mañana última jornada en Montmeló. Australia ya está más cerca.