Hamilton batió a Button desde la última posición

El único coche que sigue siendo una referencia a pesar de todo este año es el McLaren. Y lo más probable es que, de no haber perdido la pole por sanción, Lewis Hamilton habría ganado la carrera. El británico salía finalmente último, hizo una estrategia distinta de sólo dos paradas y fue capaz, incluso, de adelantar y terminar octavo por delante de su compañero Jenson Button.

Hamilton recuperó varias plazas en la salida y después iba como un auténtico loco a por los coches que le precedían. Se esperaba una degradación excesiva de sus neumáticos, pero no llegó hasta las dos vueltas finales, cuando sufrió los adelantamientos de Vettel y Rosberg.

Hamilton terminó octavo, un puesto por delante de Button y por detrás del Red Bull y el Mercedes de Sebastian y Nico. El actual campeón logró enderezar el rumbo para acabar sexto y conservar el liderato, empatado con Alonso. Su compañero Webber fue undécimo. En esta extraña F-1 no fue el día de los grandes favoritos, pero Hamilton volvió a demostrar que el McLaren es un gran coche y él un excepcional piloto.