Red Bull de nuevo bajo sospecha por su gasto

Puede que no sean los únicos que se excedan, pero los ganadores siempre están en primera línea de fuego, en el ojo del huracán. Se reabre la polémica sobre el límite presupuestario de los equipos y el cumplimiento de este acuerdo al que la F-1 se comprometió desde el año pasado. Y las sospechas apuntan de nuevo a los campeones, a Red Bull. Según ha publicado la revista italiana 'Autosprint', una auditoría independiente realizada por la empresa holandesa Capgemini desvela que la escudería de la bebida energética podría haber sobrepasado abiertamente los recursos disponibles durante la pasada temporada, la de su doblete en el Mundial de pilotos y constructores.

En concreto, se especula con un presupuesto superior a los 150 millones de euros, es decir, un cincuenta por ciento por encima de los 100 millones que los equipos acordaron a finales de 2009 como medida para combatir la crisis financiera mundial. Un acuerdo que no contempla sanciones deportivas para los que lo incumplan, pero sí el reintegro posterior de la calidad defraudada; es decir, si se comprobara que Red Bull gastó 50 millones más en 2010 (dejando al margen que las sospechas se amplían igualmente a esta campaña), para el siguiente ejercicio descontaría esa misma cantidad de su presupuesto.

Red Bull lo niega y tampoco ofrece datos esclarecedores al respecto, amparándose en su derecho a la privacidad y en que se trata de "información sensible". Sin embargo, la FOTA tiene prevista una reunión para tratar el asunto este fin de semana durante el GP de Singapur.