17.000 personas en las gradas de Jerez

El día festivo y la posibilidad de ver en la pista un gran duelo entre el piloto con más títulos, Michael Schumacher, y una gran promesa para el futuro de la competición, Lewis Hamilton, atrajo más de 17.000 entusiastas aficionados al circuito de Jerez. Fue tanta la afluencia que se llegaron a formar atascos en la entrada del circuito. A pesar de la ausencia de Fernando Alonso, el espectáculo era suficientemente interesante como para acudir y disfrutar de la Fórmula 1. Además la jornada, con una media de temperatura de veinte grados, impropia para estas fechas, también colaboró.

En lo deportivo todo el mundo esperaba ver el duelo generacional, pero el que se impuso fue otra estrella en ciernes cada vez más asentada. Robert Kubica, al volante de su BMW, fue el más rápido del día aunque no pudo superar el tiempo de su compañero, Nick Heidfeld, el martes, quedándose a poco más de una décima. Tras el polaco quedó Lewis Hamilton que prácticamente calcó los tiempos de su primera aparición. Más atrás, volvió a aparecer un Red Bull por las primeras plazas, en este caso el de Mark Webber, cuarto. Pedro de la Rosa finalizó sexto y el Renault de Nelsinho Piquet, en el séptimo lugar.

Precisamente la escudería gala es la única que no tomará parte hoy en la última jornada de test. Michael Schumacher acabó en un retrasado octavo lugar. Sin embargo el alemán dedicó la jornada a trabajar sobre el monoplaza con configuración aerodinámica de 2009, que reduce considerablemente el apoyo aerodinámico lo que lo hace más lento. Hoy volverá a rodar junto con Massa.

Otro protagonista del día, en este caso negativo, fue Ralf Schumacher que se salió dos veces de la pista y, además se le paró el coche, en su debut con Force India y acabó último con un tiempo muy alejado del conseguido por sus compañeros-rivales por un puesto en la nueva denominación de Spyker. Hoy será el turno del piloto vallisoletano Roldán Rodríguez que, tras la mala actuación de Ralf y Vitantonio Liuzzi debe apurar sus opciones para ser piloto titular en 2008. La gran impresión dejada el miércoles por Klien y Fisichella se lo pondrá difícil.