Motociclismo | GP de Gran Bretaña
España manda en los grandes premios
Assen, Rijeka, Brno, Le Mans... y Donington Park. Cinco circuitos europeos que ya conocen el sabor de un pleno de victorias españolas en la pista. El trazado británico vibró con la exhibición de tres pilotos que apuntan de forma inexorable hacia el título mundial de sus categorías.
Los ingleses pueden quedarse Gibraltar si quieren, porque desde ayer Donington Park es colonia española, es plaza conquistada. El Peñón para ellos y un triplete para nosotros, porque el gran premio inglés lo ganaron Daniel Pedrosa en MotoGP, Jorge Lorenzo en 250cc y Álvaro Bautista en 125cc. Áquel no tan lejano trío de triunfos en Le Mans 2003 (también con Pedrosa, más Elías y Gibernau) ya no es un espejismo. El hasta ayer único triplete de la era moderna del motociclismo español ya tiene compañía y supone el quinto contabilizando los tiempos en los que se corría en la categoría de 80cc.
Ocurrió en un día soleado que amaneció con una lluvia, que habría arruinado la jornada de no ser porque desapareció por fortuna a la hora de las carreras. Y fue muy cerca de Sherwood, el bosque en el que Robin Hood le robaba a los ricos para repartirlo entre los pobres, donde el tridente de lujo de nuestro motociclismo capturó un enorme pedazo de gloria. Que sirva para entregárselo en bandeja de plata a una afición, la española, alicaída en los últimos días por el fiasco futbolero de Alemania. Hay motivo para volver a sacar pecho.
El éxito no llegó por casualidad, ya que los tres ganaron en sus categorías con una autoridad incontestable, escapándose en solitario hacia la victoria y partiendo todos desde la pole, algo que sólo había ocurrido en el GP de Yugoslavia 88, en el circuito de Rijeka, con Aspar en 80cc y 125cc, más Sito Pons en 250cc.
Cuando Pedrosa firmó junto a Sete y Elías aquel triplete galo era sólo un cachorro que aspiraba a su primer título en el octavo de litro. Ahora, en cambio, es el gran referente del motociclismo español y mundial, con permiso todavía de Valentino Rossi, y se alegraba mucho de la gesta. "Está bien que sucedan estas cosas y hay que valorarlo, porque es difícil que ocurran. Además, el título de 125 está muy a tiro para Bautista y el de 250 está muy abierto y Lorenzo tiene posibilidades", dijo el tricampeón cuando supo que Bautista había rematado la gloriosa jornada.
El de Talavera salió a pista, contrariamente a lo habitual, para una carrera que cerraba el gran premio y consciente de que todos esperábamos que fuera él quien certificara el triplete. "Había visto las dos carreras anteriores por televisión y sabía que mi triunfo serviría para el triplete, pero eso no me ha metido más presión", aseguró tras pasear orgulloso la bandera de España en la vuelta de honor. En cuanto a Lorenzo, fue él quien abrió la lata en la primera prueba y aseguró que le dio "mucha alegría ver ganar a tres españoles. Felicito a mis compañeros". Un catalán, un mallorquín y un manchego, y no es ningún chiste, hicieron juntos historia en Donington Park un 2 de julio inolvidable.