Automovilismo | Nacional de GT
Nadie sale favorito tras la prueba del Jarama
Las victorias de Giao-Guerrero y de los italianos Giannocaro-Guidi no despejan las dudas sobre quién tomará el mando en el campeonato
No decepcionó el arranque del Campeonato de España de GT celebrado en el Jarama. A pesar de lo destemplado del día, la lluvia no hizo acto de presencia, por lo que los aficionados acudieron en buen número al circuito madrileño.
Lo único malo en la jornada de ayer fue el parón que sufrió la segunda carrera a causa de un accidente en la vuelta 11, justo cuando más interesante estaba. La entrada del coche de seguridad para neutralizar la prueba coincidió, además, con las vueltas en las que se debía realizar la parada en boxes para el cambio de piloto en los equipos. Pero según el reglamento, está prohibido hacerlo con el safety car en pista, por lo que ocho coches fueron sancionados con 150 segundos de penalización.
Hasta ese momento, se vivía una preciosa lucha en cabeza entre el Ferrari de Polo Villaamil, el Mosler de Lucas Guerrero y el Marcos de Jesús Díez Villarroel. Continuos adelantamientos y paseos por la grava que prometían un final de carrera apasionante entre los tres.
Pero con el accidente se fue todo al traste. La pareja Giao-Guerrero fue una de las penalizadas, y el gran beneficiado fue el Ferrari de los italianos Gianbattista Giannocaro y Alessandro Pier Guidi, que al final obtuvo la victoria.
Menos interesante fue la primera carrera. Manuel Giao, subcampeón de la Fórmula 3 el año pasado, fue adquiriendo ventaja vuelta a vuelta sobre el Porsche de Miguel Ángel de Castro, y su compañero Lucas Guerrero supo administrarla magníficamente ante Ángel Burgueño una vez que el portugués le entregó el testigo en la vuelta 16.
La categoría GTB, por su parte, tuvo claro color portugués. Las parejas Pedro Bastos-Miguel Cristovac y Fernando Espirito Santo-Pedro Bravo, ambas del equipo Racing for Portugal y corriendo con un Porsche 996, se repartieron las victorias. En GTC el triunfo en ambas mangas correspondió al Marcos Mantis de José Luis Bermúdez de Castro.
Por último, hubo mucha expectación por comprobar las evoluciones del Ascari KZ 1 R, presente por primera vez en el certamen, que pilotan los holandeses Klaas Zwart y Tom Coronel, este último piloto privado de Seat en el Mundial de Turismos. Lo cierto es que no defraudó, y se fue al box con un cuarto y un tercer puesto.