The Lord of the Rings Online, un MMORPG de ensueño

El mmorpg recomendado de septiembre se lo dedicamos a otro clásico y, hasta el momento, la mejor representación de la obra de J.R.R. Tolkien en un juego con características online. The Lord of the Rings Online llegó a nuestros hogares en 2007 y desde entonces ha sido para muchos un referente de cómo darle vida a hobbits, elfos, ents y otros seres del imaginario de la famosa trilogía.

Cumplió 15 años en 2022 y aunque ha pasado por manos de tres distribuidoras a lo largo de su vida, el videojuego está ahora mismo en una segunda juventud y renovando —poco a poco— áreas como el apartado gráfico, el sistema de misiones o agregando contenido cada poco tiempo. ¡Bienvenidos a la Tierra Media!

El sueño húmedo de cualquier tolkienista

The Lord of the Rings Online parte desde la premisa de mostrar los libros desde un prisma diferente al ya conocido, concretamente el de ver los avances de la Comunidad del Anillo desde una posición más retrasada. Así pues, nuestro héroe, amigos y otros personajes que nos iremos encontrando durante la aventura partirán desde sus lugares natales para recorrer el camino que Frodo, Sam y el resto de protagonistas ya han hecho antes que ellos.

La idea en sí misma es maravillosa porque ni tenemos la presión de ser portadores del anillo, ni tampoco la urgencia de llegar a Mordor cuanto antes para destruir el preciado —por muchos— tesoro. Esto abre posibilidades en la historia de conocer más acerca de la Tierra Media, sus problemas y otros peligros que pueden asomarse por tan querido universo. Esto último, de hecho, se cruza en múltiples ocasiones en la trama principal.

El arco narrativo se compone de diferentes libros y capítulos que iremos descubriendo a medida que avancemos en la historia y, aunque no es del todo recomendable, podemos subir a nuestros personajes sólo completando este apartado. Por otra parte por toda la Tierra Media hay multitud de personajes que necesitan de nuestra ayuda para todo tipo de tareas que, por supuesto, también ofrecen recompensas en forma de mejor equipo, dinero, experiencia o reputación.

Hablando de un juego basado en la más conocida obra literaria de John Ronald Reuel Tolkien uno se puede preguntar si además del peligroso viaje a Mordor conocemos más detalles que no se añadieron en los libros originales pero sí en otros como El Hobbit o Silmarilion, ¡incluso en Cuentos Inconclusos! La respuesta es que sí e incluso en algunas misiones se nos transportará al pasado para revivir extractos aparecidos en alguna de las obras de Tolkien. Y todo con una cantidad de detalles y amor por los libros del escritor sudafricano que quita el hipo.

El PvE manda

The Lord of the Rings cuenta con miles de misiones a completar. Si bien muchas de ellas son clónicas como en prácticamente cualquier título del género, hay muchas que están muy bien trabajadas a nivel argumental. De hecho es raro ver que alguna no supere los tres párrafos de texto para ponernos en contexto. Ahora bien, 140 niveles haciendo misiones sin parar puede atragantar al más pintado.

Para hacer las cosas algo más amenas se nos abren dos posibilidades diferentes, participar en alguna Skirmish (escaramuza) o completar mazmorras para ganar experiencia extra, rápida y llevarnos algún tesoro de por medio en forma de equipamiento, joyas o útiles. La primera opción revive diferentes hechos históricos de algún pasaje de Tolkien o del propio juego con la ayuda de un personaje no controlable que podemos modificar a nuestro antojo. Por ejemplo, podemos protagonizar cierta escena en la Cima de los Vientos luchando contra Nazguls y otros seres conocidos.

De lo segundo, poco que decir pues es una mecánica ya conocida en multitud de mmorpgs. Equipos de tres o más jugadores se reúnen para completar una mazmorra dando caza a diferentes jefes de sección y obteniendo recompensas al finalizar. Si bien no inventan la rueda, es justo decir que muchas de ellas —sobre todo a niveles medio-altos en adelante— cuentan con mecánicas muy originales, rebuscadas y divertidas. Se nos viene a la cabeza, por ejemplo, Northcotton Farm, una mazmorra donde hay que abofetear a hobbits para que despierten del embrujo al que han sido sometidos.

Entre medias de las misiones, mazmorras y escaramuzas tenemos a nuestra disposición diferentes actividades también enfocadas a jugador contra entorno. Por ejemplo el housing. En LOTRO podemos comprar una casa para nuestro personaje en diferentes regiones de la Tierra Media. Ya sea una casa élfica, gondoriana, rohirrim o de los enanos entre otras, son todas modificables tanto en su exterior como en el interior. Podemos decorar el jardín, añadirle música de bienvenida a los visitantes, personalizar por completo el interior agregando cuadros, pisos, paredes, iluminación o mobiliario. Si en alguna ocasión te has imaginado viviendo en el universo de Tolkien, en LOTRO es posible.

También cuenta con diferentes profesiones con las que crear de forma artesana nuevas recetas de comida, pociones, útiles o equipamiento. Además es bastante extenso aunque dentro de muy poco se hará más sencillo gracias a una actualización que actualizará este sistema para asemejarse a otros títulos más actuales. Una de ellas es muy curiosa, la de agricultor, donde tenemos que regar las semillas para después recolectar el producto.

Podemos por ejemplo, también, elevar nuestro nivel de amistad con diferentes facciones del título para así conseguir recompensas valiosas, descuentos en viajes entre diferentes mapas, monturas o skins únicas. O simplemente matar enemigos con el único fin de llevarlo a un taxidermista para que lo convierta en un trofeo para nuestra casa.

Hay actualmente once clases disponibles y una doceava en camino. Todas tienen diferentes roles en el campo de batalla y habilidades únicas que otros no tienen. Para decidirte por una de ellas antes tendrás que seleccionar la raza de tu personaje, ocho en total, aunque una de ellas —Beorning— solo puede ser la clase que da nombre a su raza, una suerte de luchador con los poderes de Beorn de convertirse en oso.

El combate no difiere mucho de cualquier otro mmorpg pero sí cuenta con una característica única que lo hace más estratégico en ciertos momentos y que no se ha visto en ningún otro título conocido. Se llama Fellowship Manoeuvre (maniobra entre compañeros) y se suele utilizar en jefes de gran dureza. Al iniciarla aparece en mitad de pantalla cuatro iconos de diferentes colores, cada uno con una funcionalidad, que todos los miembros del grupo deben pulsar. Dependiendo de la combinación introducida ocurrirán efectos diferentes, como restaurar la vida del grupo, hacer daño directo o periódico al enemigo, restaurar maná o un popurrí de todo.

Y por supuesto tenemos mazmorras para grupos de bandas. Desde aniquilar a un Balrog, derrotar a Saruman, revivir parte de la Batalla de Pelennor o luchar contra diferentes dragones y seres conocidos del legendarium de Tolkien. Si bien como en la mayoría de títulos solo se suele acudir a las más nuevas, siempre habrá gente dispuesta a repetirlas o conocerlas por primera vez.

Otro motivo por el que LOTRO brilla es sus posibilidades para el roleo, es decir, interpretar un personaje conocido o no, tomar parte de aventuras con otros amigos, recrear una obra de teatro, una fiesta por todo lo alto, organizar conciertos o simplemente leer cuentos de la Tierra Media en cualquier punto del mapa. Hay herramientas y escenarios preparados para ello a toneladas y una auténtica fantasía para los fanáticos.

Por desgracia donde más cojea en The Lord of the Rings Online es en su apartado de jugador contra jugador. Existe e incluso da una vuelta de tuerca añadiendo contexto, misiones, leveo y otras características, pero apenas es jugado por los seguidores de LOTRO ni tampoco lo convierten en su divertimento principal. El videojuego es, por defecto, un producto para disfrutar del entorno y sus actividades.

¿Merece la pena The Lord of the Rings Online?

Dieciséis años han pasado desde su lanzamiento y pocos títulos pueden ofrecer paisajes e historias más alucinantes que las que allí se cuentan. Tu primera visita a Rivendel es una de esas que recordarás durante toda tu vida, lo mismo cuando entras en Moria o visitas las tierras de Sauron. También cuando de pura chiripa encuentras un guiño escondido o, por ejemplo, te topas con los trolls de piedra protagonistas de cierto pasaje de El Hobbit.

Su apartado gráfico ha aguantado bien el paso del tiempo gracias a que sus desarrolladores han intentado que el juego funcione siempre con las últimas tecnologías pero al final, el motor es el que es. Se nota en la distancia de visión y su capacidad para renderizar decorados en la lejanía, en cómo se resiente el rendimiento en ciudades como Minas Tirith e incluso en las animaciones y diseños de protagonistas y enemigos, quizás lo que más espanta con diferencia a los nuevos jugadores.

Durante los últimos meses Standing Stone Games ha actualizado esta faceta del juego añadiendo y/o mejorando algunos de los modelos existentes, puliendo texturas, añadiendo la nueva clase —River Hobbit— con más opciones de personalización y otros detalles para que LOTRO se adapte a los nuevos tiempos. Todavía sigue teniendo aristas pero el esfuerzo de la compañía por mantener el juego vivo es cuanto menos loable. A la par de lo primero tenemos también su estupenda banda sonora, muy en consonancia de lo que uno se esperaría encontrar en esos ficticios lugares y con melodías que os acompañarán durante cualquier momento de vuestra vida. Pero ojo, también tiene algunos altibajos en este apartado, aunque son las que menos.

Se sustenta bajo un modelo gratuito y otro de suscripción, siendo más interesante lo segundo, aunque poco a poco las restricciones de las cuentas F2P se van eliminando. El jugador puede disfrutar hasta nivel 100 aproximadamente de manera gratuita, después debe comprar las siguientes expansiones si desea subir a nivel máximo y disfrutar de toda la historia. Sin embargo se puede conseguir monedas para la tienda del juego completando misiones, logros y otro tipo de contenidos por lo que es posible hacerse con bastante contenido tan solo jugando. Existen además servidores clásicos accesibles solo bajo suscripción que se basan en antiguas versiones adulteradas del juego. No son demasiado fieles pero también cuentan con su propio público que los apoya fervientemente.

A pesar de lo que pueda parecer, es un título muy jugado e incluso puede encontrarse una enorme comunidad española alrededor del juego. Cerca de mil jugadores de habla española comparten a diario aventuras, guías, consejos o rolean en LOTRO ESP, el servidor Discord más grande en español del título.