Análisis de Marvel´s Spider-Man 2, Insomniac ha superado la secuela de Sam Raimi

Hay análisis que te piden ir directo al grano. Marvel’s Spider-Man 2 es uno de ellos. Para hablar de lo nuevo de Insomniac Games no hace falta dar ningún rodeo. Es muy fácil. Se trata, simple y llanamente, de una secuela perfecta y del mejor juego de la desarrolladora en toda su carrera. Teniendo en cuenta que hablamos de los creadores de Ratchet & Clank, Spyro y la saga Resistance, esto son palabras mayores, pero no albergamos ninguna duda al pronunciarlas.

Y si no le damos demasiadas vueltas a estos primeros párrafos es porque el juego no necesita presentación. A nivel gráfico y jugable no hay apenas sorpresas. Es muy parecido a los dos anteriores. Ahora bien, Marvel’s Spider-Man 2 supera en todo a sus predecesores. En absolutamente todo. Es un más y mejor de manual. No hay un solo campo en el que no haya mejorado. No hay un solo apartado que podamos considerar superior en el original o en Miles Morales. Insomniac ha pulido todos y cada uno de los ingredientes de una fórmula que ya era sobresaliente en su día, así que podéis imaginar el resultado.

Estamos ante una aventura memorable, de esas que al terminar te dejan vacío por dentro y sin saber a qué jugar a continuación. Pensábamos que no había mejor secuela que la de Sam Raimi. Nos equivocábamos.

Cocinando la secuela perfecta

A lo largo de dos años de tráileres y avances, Insomniac Games ha ido anunciando y presentando las principales novedades de Marvel’s Spider-Man 2. Que si tiene un mapa el doble de grande que añade los distritos de Queens y Brooklyn (Coney Island incluida). Que si ahora podemos manejar a Peter y a Miles y cambiar entre ambos a lo GTA V (contando con un árbol de habilidades para cada uno, más un tercero en común). Que si existe otra forma de moverse por Manhattan (las alarañas), que si el combate ha sido remozado (ahora hay botón de parry, modo berserker y poderes y técnicas exclusivas de cada héroe). Incluso hemos visto al simbionte en acción y podido confirmar más de 60 trajes para sus protagonistas (la mayoría con hasta cuatro variaciones de color). En definitiva, añadidos estupendos que enriquecen y potencian la experiencia. Pero hay muchos más. ¿Queréis saber, sin spoilers, que otras novedades se había callado Insomniac?

Ampliar

A lo mejor es porque la desarrolladora pecaba de modestia, pero en ese caso ya lo decimos nosotros por ella. Marvel’s Spider-Man 2 también tiene algunos de los mejores combates contra jefes finales que haya visto el género en los últimos años. No solo hay un montón de villanos y enfrentamientos de los que no sabéis nada, sino que los confirmados (Lizard, Kraven y Venom) hacen que veamos a los del original como meros sparring. Estas batallas han dado un gran paso adelante y os recomendamos encarecidamente disfrutarlas en las dificultades más altas para ver todavía más patrones enemigos y tener que usar aún más estrategias durante las mismas.

Además, ¿no se ha dicho siempre que una historia es tan buena como lo es su villano? Pues entonces la de Spider-Man 2 es demencial porque lo de Kraven y Venom será muy, pero que muy difícil de superar. Estamos ante una trama muchísimo más oscura y violenta, por momentos de tono sorprendente para lo que es habitual en Marvel y en las aventuras del trepamuros. Hay muertes, sangre y secuencias de cine de terror. Los fans del cazador y del simbionte pueden frotarse las manos.

Ampliar

Un inesperado parecido con Uncharted 4

La historia tampoco va escasa de emoción. Peter y Miles han crecido y se enfrentan a nuevas situaciones personales. A Parker le atormenta el mundo adulto, la necesidad de encontrar un trabajo y de asentar la cabeza con MJ. Su parte recuerda a esos momentos (preciosos y costumbristas) que vivíamos en Uncharted 4 con Nathan y Elena. Pero es que encima el bueno de Pete aún lidia con el duelo por tía May, trauma al que suma la amenaza de perder a otro ser querido: Harry Osborn, su mejor amigo.

En el otro lado de la ecuación estaría un Miles sobrepasado. La presión por entrar en la universidad, por los compromisos con Harlem y por la necesidad de dar un paso al frente y dejar de ser “el segundo Spider-Man” ahora que Peter está actuando raro y que la ciudad necesidad ayuda. En medio de todo eso florece una creciente obsesión con Martin Li, el asesino de su padre. A Miles le tentará el lado oscuro y la idea de que quizás no haya redención para los villanos. La idea de que a lo mejor Li estaría mejor muerto...

Entre dramita y dramita, un buen número de secuencias de acción cargadas de chascarrillos y de la épica habitual. Por eso, aunque el primer tercio del juego tiene momentos en los que se empantana presentando las dichosas mecánicas de su mundo abierto, en cuanto las misiones principales arrancan motores no hay quien suelte el mando. Es una historia trepidante.

Ampliar

Su punto débil ya no es tan débil

Otra cosa que se había guardado Insomniac Games son las mejoras efectuadas en su mundo abierto. En ese sentido, la principal noticia es que está mucho menos sobrecargado. Sigue habiendo guaridas, desafíos de combate y velocidad, minijuegos y coleccionables, pero se han replanteado para hacerlos más satisfactorios. ¿Cómo? Reduciendo su número, aumentando la variedad y añadiendo alguna trama curiosa detrás. Los hay que hasta tienen jefe final y que hasta plantean posibles villanos y temas para Marvel’s Spider-Man 3.

Los contenidos secundarios siguen siendo el punto más débil del juego y todavía tienen un amplio margen de mejora, pero al menos ya no son tan genéricos y repetitivos. Adiós a “las atalayas” para desbloquear el mapa y a los tediosos delitos aleatorios, por ejemplo. Estos últimos siguen presentes, pero al menos ya no son obligatorios para el 100%. No sirven para completar distritos, sino para obtener “dinero” con el que comprar nuevos trajes (dinero que puede obtenerse de otras formas, ergo queda a nuestra elección salvar a los ciudadanos de Nueva York). También ha dejado de ser necesario dedicarse a labores de vigilante entre una misión principal y otra, pudiendo meter la directa y centrarnos en disfrutar de lo importante.

Merecen mención especial algunas secundarias loables y de lo más emotivo. No queremos entrar en detalles, pero hay flashbacks de la vida de Peter, viejos conocidos de la misiones secundarias del primera juego cuya historia se prolonga y hasta un nivel muy concreto a los mandos de cierto personaje que da un maravilloso paso para la representación de todos los colectivos. ¡Si hasta las misiones de sigilo con MJ han ganado enteros! Ahora son mucho más ágiles y han cambiado su principal problema: lo lineales y fáciles que eran. En Marvel’s Spider-Man 2 por momentos parecen propias de un third person shooter y hasta cuentan con algunos de los escenarios más grandes de la trama principal. Mucho más vistosas e interesantes, pasaremos de querer eliminarlas a pedir más.

Ampliar

Mejorando lo inmejorable

Sumad ahora todo lo que ya conocíamos, como el tema de la movilidad. Aún siendo un apartado que creíamos perfecto en el original, en Marvel’s Spider-Man 2 es aún más dinámico si cabe. Insomniac ha logrado mejorar lo inmejorable. Desplazarse por la ciudad resulta más rápido y variado, con nuevos movimientos de balanceo y las vertiginosas “alarañas” como alternativa. Ambos sistemas se combinan de manera fabulosa y harán que volvamos a olvidarnos del viaje rápido. Moverse por un mundo abierto nunca fue tan divertido.

Lo mismo sucede con el combate. Aunque las bases son las mismas, Marvel’s Spider-Man 2 es más desafiante, cuenta con bastantes más tipos de enemigos diferentes y exige usar y estar pendiente de muchas más cosas. Es el caso del botón de parry (sorprendentemente bien implementado), el modo berserker (una auténtica locura con el traje de simbionte) y las nuevas y poderosas habilidades de Peter y Miles, entre las que habrá que elegir una vez desbloqueadas (tenemos 60 niveles por delante, tres árboles de habilidades y decenas de mejoras para el traje y los gadgets). Se acabó lo de espamear un mismo objeto y limitarnos a esquivar y machacar el botón de ataque. Hay rivales con barra de vida, hordas de enemigos que llenan la pantalla...

Ampliar

Un portento gráfico

Quedaría hacer mención a un apartado gráfico que, por ridículo que suene, ha venido siendo infravalorado desde hace meses, desde que el juego fuera mostrado por primera vez en el PlayStation Showcase. Que si ya no sorprende tanto, que si no ha evolucionado y no impresiona... Falacias, absurdidades. Ya quisieran la inmensa mayoría de lanzamientos verse (y oírse) como Marvel’s Spider-Man 2. Es un espectáculo de altura y se mueve en la excelencia en todo momento, pero su grandeza está en los pequeños detalles.

Se ha disparado la distancia de dibujado y la densidad del tráfico, los interiores que vemos a través de las ventanas han pasado a ser diferentes y tener vida interior, los trajes irán rompiéndose en combate y así un largo etcétera. A lo mejor exige fijarse algo más, pero es un portento muy superior al primero. Algunas secuencias y alardes como el del viaje rápido se recordarán durante años. Podemos teletransportarnos a la calle que queramos de un mapa inmenso en cuestión de cinco segundos. Sin palabras.

Ampliar

Nuestro único pero podrían ser algunos cuelgues puntuales que suponemos se corregirán con los parches de lanzamiento y las caras, las famosas caras. Algunas son increíbles y otras siguen sintiéndose hieráticas, como de cera. En un extremo, el bueno, Miles. En otro MJ. En medio, yendo de uno a otro, la de Peter. Ellas y ciertos efectos como los de las explosiones serían lo único reseñable de querer buscar los tres pies al gato. Pero a este nivel, resulta rídiculo. ¿Cómo vas a criticar sus caras existiendo fotos como la que hay sobre estas líneas? Por no hablar de todos los modos gráficos que vienen, tan sobrado que hasta mete ajustes para los 40 fps entre los 30 y los 60.

Para terminar, como es marca de la casa en Sony, Marvel’s Spider-Man 2 llega con un sensacional trabajo de doblaje al castellano. Venom os pondrá los pelos de punta y, a modo de curiosidad, tenemos a Javier Gámir, la voz de Marcus Fénix, en la piel de Kraven. Todas ellas son abrazadas por una banda sonora que pone la guinda de pastel a la experiencia y que en esta ocasión incorpora varias canciones licenciadas para a los momentos más emotivos del juego. Y los hay, creednos.

Análisis realizado con un código cedido por PlayStation.

Ampliar