El cine de terror tiene otra niña bonita: Skinamarink, la nueva Bruja de Blair y Paranormal Activity
La nueva película de terror que está en boca de todos ha recaudado un millón de dólares en USA con apenas unos pases y solo 15.000 euros de presupuesto.
¿Qué tienen en común El proyecto de la Bruja de Blair y Paranormal Activity? En primer lugar, el género. Terror psicológico del bueno. En segundo, el modo de presentarse ante el espectador. Ambas simulan ser grabaciones reales y amateur. Y en tercero, el tremendo éxito de taquilla que consiguieron partiendo de un presupuesto irrisorio. The Blair Witch necesitó 60.000 dólares para materializarse y recaudó cerca de 250 millones. A su vez, Paranormal empezó con apenas 15.000 y hoy día acumula unos 195 millones sin contar ninguna de sus siete secuelas (¡siete!). Pues bien, os presentamos a la heredera de ambas. Una cinta que ha hecho check en esas tres casillas y se ha vuelto la niña bonita del cine de terror. Os presentamos Skinamarink.
"Dos niños se despiertan en medio de la noche y descubren que su padre ha desaparecido y que todas las ventanas y puertas de su casa ya no están". Así de escueta, directa y sencilla es la sinopsis de Skinamarink, cuyo tráiler tenéis sobre estas líneas. Se trata de la película de miedo de la que habla todo el mundo estos días y no es para menos. Con un presupuesto de 15.000 dólares, como Paranormal, y estrenándose en un puñado de salas con cuatro pases contados, la cinta acaba de alcanzar el millón de dolares recaudados sólo en Estados Unidos y el boca a boca parece haber echado la bola de nieve a rodar.
Estamos ante el primer proyecto de largometraje de su director, Kyle Edward Ball, quien ha ganado más de 60 veces lo invertido, pero no lo ha tenido fácil. Antes de su estreno, Skinamarink acudió a varios festivales de cine online, en uno de los cuales hubo un error y la película se filtró y subió a internet. No fue la única afectada y aquello terminó con la carrera comercial de la mayoría, pero no con Skinamarink. La cinta se hizo viral en YouTube y TikTok, convirtió el incidente en combustible y muchos de quienes ya se la saben han decidido apoyarla en salas, convirtiéndola en una obra de culto y un nuevo destino de peregrinación para los más acérrimos del género.
Skinamarink está cosechando opiniones polarizadas (5,3 en FilmAffinity) debido a su carácter experimental (está hecha a base de metraje encontrado), su ritmo aletargado (que se extiende hasta los 100 minutos de duración) y la frecuencia con la que sus planos fijos no muestran más que paredes y pasillos a oscuras, invitando al espectador a permanecer atento a los sonidos y el movimiento si no quiere llenar los vacíos a base de imaginación. Otra de esas películas en las que la experiencia puede ser tan aterradora como la propia cinta.