Max Payne 3, una década de sangre y plomo; 5 motivos por los que no puedes perdértelo
Max Payne 3 cumple este 15 de mayo una década en el mercado. Te contamos nuestros motivos por los que no puedes perderte una obra maestra del género.
Max Payne 3 tiene un hueco en el podio de los mejores shooters en tercera persona que nos dejó la generación de PS3 y Xbox 360. Tras su paso por Remedy, era Rockstar Studios quien decidía dar un paso al frente en una aventura desgarradora en todos los sentidos.
Brutal al apretar el gatillo y contundente al representar la desigualdad en el pulmón financiero de Brasil, este 15 de mayo cumple nada menos que una década en el mercado. Con la confirmación del remake de las dos primeras entregas, que volverán a sus responsables originales, la saga se encuentra de rigurosa actualidad. Te contamos los cinco motivos por los que debes descubrir (o revisitar) una experiencia top en el género.
Max frente al espejo
El estilo noir que impregnó ambas entregas de Remedy chocó frontalmente con la visión que Rockstar le tenía preparada. Encontramos a un Max sumergido en el alcohol, su refugio contra las penurias que ha sufrido en la vida. La pérdida de su familia fue un punto de inflexión; heridas que el expolicía no puede cicatrizar.
Su actual situación laboral no ayuda a escapar de esos viejos fantasmas. Le tocó, de nuevo, cumplir lo que siempre tuvo que hacer: servir y proteger, esta vez a sueldo de una familia multimillonaria en pleno corazón de Sao Paulo. Sus miembros no pasan precisamente desapercibidos, y son parte protagonista de la fotografía nocturna brasileña. Las mafias locales, la corrupción política e intereses intrafamiliares son solo algunas de las amenazas que acechan a su alrededor.
Una parte de la comunidad compartió su malestar por los largos diálogos de Max consigo mismo, pero en la práctica era una parte esencial para comprender que estaba inmerso en un descenso a los infiernos que ya conocía. Otra oleada de crímenes, otra persona que proteger… y otra búsqueda incesante para enmendar sus errores.
Apretar el gatillo, una forma de arte
Los avances del estudio en materia jugable eran palpables tras el lanzamiento de Grand Theft Auto IV, que de alguna forma marca un paso ascendente hasta Red Dead Redemption. El Salvaje Oeste de Rockstar ofrecía una jugabilidad a prueba de bombas en pleno 2010; por algo su multijugador fue tendencia en los principales ecosistemas online de aquel entonces.
Max Payne 3 toma esa solidez para llevarla al siguiente nivel. Lo que nos encontramos es un shooter preciso y contundente sin perder de vista el estilo. El bullet time, marca registrada de la casa, era algo más que una mecánica; convertía el apretar el gatillo en una forma de arte.
Una bala medida entre ceja y ceja era la chispa que necesitaba para encender un sistema cinemático medido para impactar al espectador. Era, de alguna forma, una recompensa visual que te envolvía todavía más en esta sinfonía de sangre y plomo. Los modos de bonificación, como Minuto en Nueva York, elevaban el ritmo cinematográfico.
Jugabilidad a prueba de bombas
Pero Max Payne 3 gana en las distancias cortas. Su enfoque cinematográfico no deja a un lado su músculo jugable. A los mandos nos encontramos con un shooter en tercera persona clásico, de los que hacían propio el juego entre coberturas tan popular por aquel entonces. A la fórmula se le añaden las piruetas conocidas del policía a cámara lenta que marcaron la identidad de la saga.
Esa identidad a la que aludimos se mezcla de manera inevitable con el hacer de Rockstar. El estudio optó por encajar a Max dentro de unas reglas realistas desde el propio control. El peso del personaje influye a la hora de ‘bailar’ entre las coberturas. Los saltos suicidas, por ejemplo, tienen un efecto coherente con el escenario, y una vez en el suelo notamos su cansancio al girar como buenamente puede.
La coherencia se traslada a cómo se desenvuelve con el armamento. Acciones tan simples como cambiar de arma tienen recorrido físico. No estás preparado constantemente para seguir disparando, sino que debes seguir las reglas de lo que haría una persona en su situación. Lo mismo ocurre cuando alternas entre una pistola y un arma larga: Max recarga la primera colocándose en el sobaco el fusil de turno. Cuando entramos en el estado de última oportunidad, en el que se puede salvar matando al enemigo que acertó una bala de muerte, aparecen estas mecánicas de una manera evidente.
Niveles para el recuerdo: de Panamá a la jungla de oficinas
La campaña de Max Payne 3 presenta algunos momentos para el recuerdo de los aficionados. Las favelas son un punto crítico de los acontecimientos, pero hay otros que logran transmitir una trascendencia emocional.
Quien escribe estas líneas tiene como punto favorito el nivel del Canal de Panamá. El ritmo alicaído de los sintetizadores acompaña a la perfección lo que ocurre en pantalla. Despertamos en un crucero de lujo ocupado por decenas de enemigos. A medida que nos abrimos paso descubrimos el desenlace de la tripulación y las motivaciones de este asalto. Las vibras de 007 están presentes; no desentonaría si el protagonista hubiera sido Daniel Craig.
Otro de los momentos más impactantes se encuentra en las oficinas. Todo el nivel es una sección de tiroteo de unos veinte minutos. Los papeles vuelan, los cubículos se agujerean como un queso... De un momento a otro estás inmerso en una jungla de puestos de trabajo en la que poco a poco se va reduciendo casi a las cenizas.
Disponible en la mayoría de sistemas actuales
Tienes varias oportunidades para disfrutar de Max Payne 3 en sistemas actuales. La más evidente se encuentra en PC; podrás encontrarlo tanto en Steam como en el cliente propio de Rockstar. Y sí, también puedes jugarlo en una Steam Deck. Pese a que el sistema de verificación de Valve lo señala como “no compatible”, funciona si arrancas el juego en la versión experimental de Proton. Puedes seleccionar que se inicie de esta forma desde el menú de propiedades dentro de tu biblioteca.
En consola la suerte se debate según el ecosistema en el que te encuentres. Si tienes una Xbox One o Xbox Series X|S puedes utilizar tu copia física o digital; la versión de Xbox 360 forma parte del catálogo retrocompatible. Sin embargo, en PlayStation no hay opciones en estos momentos para jugarlo. Debes dirigirte a la plataforma original (PS3) para poder disfrutarlo en su plenitud
- Aventura
- Acción
Tercera entrega de las aventuras del detective Max Payne. Max está ahora atrapado en una ciudad llena de violencia y derramamiento de sangre, en la quedeberá usar sus armas e instintos en una búsqueda desesperada por la verdad y una salida.